Llardén releva a González-Adalid en la presidencia de Enagás
El consejo de Enagás, empresa que actúa como gestor técnico del sistema gasista, acordó en su reunión de ayer y por unanimidad nombrar nuevo presidente a Antoni Llardén en sustitución de Antonio González-Adalid, que llevaba en el cargo desde junio de 2002. Tras el nombramiento, Llardén se ha desvinculado 'totalmente' de Gas Natural, empresa en la que ocupaba la Dirección General de Recursos, y ha renunciado a su cargo de presidente de la patronal gasista Sedigás.
González-Adalid ha renunciado al puesto de consejero en Enagás 'en interés de la sociedad' y para 'evitar que se prolonguen situaciones de incertidumbre que pudieran ser perjudiciales', aseguraba ayer un comunicado de la compañía remitido a la CNMV.
El consejo reconoció la labor desarrollada por González-Adalid durante estos años, marcados por la entrada de nuevos operadores en el sector gasista y por el crecimiento del consumo de gas. El hasta ahora presidente accedió al cargo en 2002 coincidiendo con la OPV que Gas Natural, entonces propietaria del 100% de Enagás, realizó en 2002 para desprenderse del 65% del capital.
A propuesta de Llardén, el consejo acordó nombrar vicepresidente a José Luis Olivas, presidente de Bancaja y consejero de Enagás en representación de la entidad financiera.
Según Enagás, con el nombramiento del nuevo presidente los accionistas 'han querido marcar un punto de inflexión en la trayectoria de la compañía' que, como gestor técnico del sistema gasista, 'debe afrontar nuevos retos y adaptarse al nuevo marco regulatorio del negocio en España'.
Antoni Llardén nació en Barcelona en 1951 y es ingeniero industrial, especializado en organización de empresas, por la Universidad Politécnica de esa ciudad.
Llardén es miembro del Consejo Directivo de Eurogas y del Comité Ejecutivo de la International Gas Union, y forma parte de la Junta Directiva del Club Español de la Energía.
Los inversores reaccionaron ayer con inmoderado optimismo ante la sustitución de Adalid por Llardén y su cotización subió un 3,47% hasta 17,30 euros.
El consejo analizó y dio por buena también la reciente modificación de la retribución de los activos fijos de Enagás, situada en un entorno de entre el 7 y 8%, si bien la opinión mayoritaria fue de la criticar la opacidad con la que el gobierno preparó la adopción de la medida, que ha ocasionado un severo castigo en Bolsa a la sociedad.
El pasado año Enagás obtuvo un beneficio neto de 225,3 millones, un 18% más que en 2005. Las inversiones acumuladas en 2006 ascendieron a 433,2 millones, mientras que los activos puestos en explotación alcanzaron los 326,8 millones.