Gallardón rechaza la ampliación de la terminal del AVE de Madrid-Atocha

El Ayuntamiento de Madrid ha presentado importantes alegaciones al proyecto de ampliación de la estación de Atocha que Fomento presentó hace un año para multiplicar su capacidad a 34 millones de pasajeros al año. El alcalde Ruiz-Gallardón dice que la ampliación colapsará el centro y propone trasladar la terminal del AVE a Abroñigal, 1.500 metros hacia el sur.

El Ministerio de Fomento tiene abiertos ya dos frentes ferroviarios en Madrid. El primero es el de la estación situada en el norte de la ciudad y el contencioso se produce a costa del macro proyecto urbanístico denominado 'Operación Chamartín'. El segundo litigio fue abierto ayer por el alcalde y tiene como protagonista el mayor complejo ferroviario de la capital ubicado en el centro; la estación de Atocha.

Alberto Ruiz-Gallardón ha anunciado que la corporación municipal que preside rechaza la propuesta presentada en marzo último por Ministerio de Fomento y cuyo objetivo es ampliar la estación de Atocha para que de servicio a 35 millones de pasajeros año, frente a los 10 millones que acoge en la actualidad.

El ayuntamiento de Madrid ha presentado sus propuestas a través de una alegaciones al proyecto del Gobierno central, en las que plantea que la terminal de trenes del AVE sea trasladada a la zona del Abroñigal (donde hoy existe un complejo ferroviario de carga para contenedores) que está situado a una distancia de 1.500 metros de distancia hacia el sur. En el proyecto de Gallardón, Atocha permanecería como nudo para cercanías.

Fuentes del Ministerio de Fomento aseguraron que 'estamos estudiando con todo cuidado las alegaciones que ha presentado el Ayuntamiento, como no podía ser de otra manera'. Por su parte, fuentes del Adif, la empresa pública propietaria de las terminales de Atocha y de Abroñigal señalaron que el proyecto de Magdalena Álvarez es 'viable y bueno para el ferrocarril y para Madrid', aunque reconocieron que la decisión final 'no se encuentra en nuestras manos'.

La nueva ubicación propuesta por el Ayuntamiento para construir una macro terminal desde donde lleguen y partan los principales corredores del AVE, no es la primera vez que sale a colación. En el año 2000, el desahogo de Atocha hacia la actual estación de contenedores ya fue estudiado por los técnicos de la antigua Renfe, aunque nunca llegó a tomarse en consideración.

El alcalde de Madrid argumenta que la ubicación que propone cuenta con un espacio disponible de 70 hectáreas frente a las 17 de Atocha y por tanto 'no plantea limitaciones de espacio'. Además ' están apartados del centro urbano y bien comunicados'. Ello permitirá crear aparcamientos para coches, autobuses y otras infraestructuras imprescindibles.

El alcalde señaló que la gran extensión de los terrenos de Abroñigal, permitiría al Ayuntamiento autorizar en ellos a Fomento los usos lucrativos necesarios para afrontar total o parcialmente el coste de las obras necesarias, algo que el alcalde adelantó que no consentirá en el entorno de Atocha, como pretende el Ministerio.

La propuesta municipal no impide que los trenes de alta velocidad que lleguen a Madrid puedan parar, además de en Abroñigal, en Atocha o en Chamartín y defiende la posibilidad de que los AVE lleguen hasta el aeropuerto de Barajas. Si esta alternativa se llevara a cabo, la estación de contenedores se trasladaría al nuevo Puerto Seco de Madrid, más al este

El Ayuntamiento presentó su rechazo y su alternativa en un dossier de alegaciones entregado a Fomento el pasado 14 de diciembre. Ruiz-Gallardón aseguró ayer que la reforma que propone se presenta 'con una sincera e inequívoca voluntad de cooperación institucional' y desde un apoyo 'rotundo' a la extensión de la red de alta velocidad.

Dos terminales para 34 millones de pasajeros

Magdalena Álvarez, ministra de Fomento, presentó el pasado marzo un proyecto de ampliación de la estación de Atocha en Madrid para adaptarla al crecimiento del tráfico ferroviario de los próximos 15 años, que ahora está siendo contestado desde el Ayuntamiento de la capital.El plan presentado por el Gobierno central prevé una inversión de 900 millones para que el complejo ferroviario pueda dar servicio a 34 millones de pasajeros cada año. Para conseguir este incremento de capacidad Fomento planea crear dos terminales ferroviarias diferenciadas. La primera será utilizada para las llegadas de pasajeros y la segunda para las salidas. El proyecto prevé duplicar la capacidad de estacionamiento de trenes, pasando de 15 a 33 vías, y triplicarán también las plazas de aparcamiento, que pasará a ser 3.500 frente a las 1.000 actuales. También se ampliará la bolsa de taxis, que hoy no supera las 90 plazas y tras la reforma llegará a 280.El proyecto de Fomento prevé también la construcción de un túnel de alta velocidad que conectará Atocha con la estación de Chamartín, en el norte de la ciudad. El plazo de ejecución planteado es de tres años, a los que habrá que sumar otros 18 meses previos (desde el pasado marzo) para desarrollar las declaraciones de impacto ambiental y los proyectos constructivos.

Escasez de vías

¦bull; Las ventajas que ofrecen al AVE la centralidad de las estaciones, tanto la de Atocha en Madrid, como la de Sans en Barcelona, tienen como contrapartida negativa que ofrecen una escasez de vías para que los trenes puedan cargar y descargar a sus pasajeros.