Bielorrusia impone un arancel por el tránsito del petróleo ruso
Bielorrusia anunció ayer la imposición de aranceles aduaneros al petróleo ruso que transita por su territorio, poco después de que el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, amenazara a Moscú con medidas económicas de represalia.
El primer ministro bielorruso, Serguéi Sidorski, señaló que, de hecho, desde el pasado 1 de enero ya rigen unos aranceles de 45 dólares por cada tonelada de crudo ruso que cruza la frontera, según informó ayer la agencia oficial Belta. Rusia exporta a través de los oleoductos bielorrusos unos 70 millones de toneladas anuales de petróleo, en su mayoría con destino a Polonia y Alemania.
Este es el penúltimo capítulo de la guerra energética que están librando Rusia y Bielorrusia. La primera batalla se libró el pasado 8 de diciembre, cuando Rusia estableció un arancel a la exportación de petróleo a Bielorrusia de 180,7 dólares por tonelada, aduciendo que Minsk refinaba el crudo ruso y se lo revendía a otros países europeos a precios de mercado. Como respuesta a este arancel, Bielorrusia propuso compartir los aranceles a la exportación, a lo que no obtuvo respuesta. Entonces el consorcio estatal bielorruso Belneftekhim decidió suspender el 30 de diciembre todos los contratos de compra de crudo firmados con compañías rusas.
El Brent cae dos dólares
Por otra parte, el precio del barril de crudo cayó ayer dos dólares como consecuencias del buen clima que se está viviendo en Estados Unidos, que está reduciendo la demanda del mayor consumidor mundial de combustible para calefacción, y por la falta de interés de fondos de inversión que parecían más atraídos en los boyantes mercados de acciones que en las materias primas.
El barril de Brent, de referencia en Europa, cayó hasta los 58 dólares.