Virus moralistas, juguetones y cotillas en el anecdotario anual de Panda Software
El miedo a un virus informático responde tradicionalmente a la posibilidad de que éste dañe tu ordenador, pero estos pequeños programas pueden tener otras finalidades menos peligrosas y, en ocasiones, algo cómicas. Panda Software ha publicado como cada año por estas fechas su anecdotario de los virus, en el que podemos encontrar al más moralista, el más ansioso, el peor candidato o el más amarillista. La seguridad informática vista con un poco de humor.
Panda recuerda que, pese a que algunos de los virus incluidos en esta lista pueden parecer curiosos, e incluso divertidos, “lo mejor es mantenerse alejado en todo momento de las amenazas informáticas descritas o de cualquier otra existente”. Y es que algunos de los virus pueden despertar el cariño de los nostálgicos como el ‘gusano’ DarkFloppy.A, que según la compañía de seguridad “parece no haber oído hablar del correo electrónico, la mensajería instantánea, los programas P2P ni nada que se les parezca”, ya que se propaga a través de la copia en disquetes.
El título de virus más juguetón de 2006 es para Nedro.B, que tras infectar un sistema se dedica a cambiar iconos, ocultar extensiones de archivos y eliminar opciones del menú Inicio, entre otras bromitas que pueden provocar cierto desconcierto para el usuario. De “mentiroso” tacha Panda a SafetyBar, un virus que se presenta para ofrecer “desinteresadamente” información sobre seguridad informática, pero los programas que ofrece para descarga advierten al usuario que su ordenador se encuentra infectado por amenazas inexistentes.
El sexo, omnipresente en Internet, también tiene sus menciones en el anecdotario, se refiere al virus FormShared.A como el más casto del año. Se trata de un código malicioso que se propaga en las redes de intercambio de archivos ofreciéndose a los internautas con más de 37.000 nombres atractivos, entre los que sorprendentemente ninguno hace alusión al sexo. En el otro extremo de la balanza se sitúa Gatt.A, llamado el más promiscuo porque es capaz de infectar cualquier plataforma sobre la que se ejecute. Al virus Zcodec se le califica por otra parte de “moralista”, pues controla si el usuario accede a ciertas páginas web con contenido pornográfico, probablemente “para enviarle publicidad personalizada”.
El virus más cotilla es según Panda Software WebMic.A, un código malicioso “capaz de grabar sonidos e imágenes, utilizando para ello el micrófono y la cámara web que estén conectados al ordenador”. Y “el más amarillista” Nuwar.A, que no para de enviar mensajes asegurando que ha empezado la guerra nuclear.