Solbes eleva la previsión de PIB y empleo en 2007
El Gobierno aprobó este viernes la revisión del programa de Estabilidad español 2006-2009 que remitirá a Bruselas próximamente, con una sensible mejora en sus principales previsiones macroeconómicas para este año y 2007, que abarcan tanto al PIB como a la creación de empleo, el excedente fiscal y la deuda pública.
La revisión al alza de las previsiones oficiales se centran en un mejor crecimiento económico sobre lo previsto tan sólo seis meses antes (en julio) por el Ministerio de Economía, y que fueron incluidas en el proyecto de ley de Presupuestos del Estado. Así, el aumento del PIB estimado para este año se eleva del 3,4% al 3,8%, una vez que se conocen los datos cerrados del tercer trimestre; y del 3,2% al 3,4% (dos décimas más) para 2007, a pesar del alza de la inflación y del shock petrolero del verano.
Esta mejora generalizada de la situación económica española, favorecida por la recuperación del sector exterior, tira del resto de agregados de la economía. Así, el departamento que dirige Pedro Solbes estima que este año se cerrará con una creación neta de 550.000 empleos en términos de contabilidad nacional, 30.000 más que lo previsto en julio, elevándose ligeramente la productividad, al 0,6%.
La demanda nacional continúa impulsada tanto por el consumo como por la inversión. Destaca, en este último apartado la inversión en bienes de equipo con un incremento medio previsto para este año del 9,5%.
En el sector exterior destaca sobre todo la mejora de las exportaciones, fruto de la recuperación de la demanda de países como Alemania, que permitirá reducir a -1,1 puntos la contribución neta del sector exterior al PIB español.
La recaudación tributaria también marcha bien. Economía ha elevado el superávit previsto para este año para el conjunto de administraciones públicas, del 0,9% al 1,4% del PIB, algo que se presume incluso corto si se tiene en cuenta las últimas cifras de la Seguridad Social (por sí sola cuenta con un excedente del 1% hasta noviembre).
Durante la rueda de prensa del Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera del Gobierno, Teresa Fernández de la Vega, destacó que la economía española acabará este año en plena fase de expansión, 'con el mejor crecimiento en los últimos seis ejercicios, y un punto por encima de la media europea'. Un crecimiento, además, más equilibrado, gracias a la menor aportación negativa del sector exterior.
Sólo un 36,6% de deuda
Para 2007, las cifras también se han corregido al alza, aunque con un menor tono expansivo que para 2006. El nuevo PIB previsto aumenta dos décimas, del 3,2% al 3,4%, lo que permitirá generar 481.000 empleos netos (27.000 más de lo que se esperaba al final del primer semestre), recortando la tasa de paro hasta el 7,8% de la población activa. El superávit fiscal se eleva de 0,7% al 1% del PIB.
Pero una de las novedades que más destacan es la corrección a la baja de la deuda pública. En 2006, el Tesoro habrá emitido 12.000 millones menos de deuda del Estado sobre lo estimado. Esto permitirá seguir reduciendo el ratio de deuda del Estado. El nuevo objetivo del Gobierno es situar el próximo año el ratio de deuda pública (incluye la de comunidades y municipios) en el 36,6% del PIB, un punto menos de lo que había incluido inicialmente en los Presupuestos de 2007 (37,7%). Esta menor deuda se podrá enjugar gracias al exceso de ingresos sobre lo estimado.
A medio plazo (2008 y 2009) las previsiones de PIB se atenúan, aunque continúan por encima del 3%.
3.000 millones de déficit territorial
La mejora en el superávit fiscal previsto no es homogénea. Según las previsiones hechas públicas este viernes por el Gobierno e incluidas en el programa de Estabilidad, la mejora de las cuentas públicas corresponde sobre todo al Estado y a la Seguridad Social, esperándose un peor comportamiento de las administraciones territoriales. Para este año que acaba, el Ministerio de Economía prevé que comunidades y municipios cierren con un déficit presupuestario del 0,3% del PIB, unos 3.000 millones de euros, siendo las únicas administraciones que acaben en números rojos, a pesar de la intención del Ejecutivo de que se mantengan, al menos en equilibrio, en una época de bonanza económica como la actual.El déficit fiscal territorial para este año se repartiría entre los gobiernos regionales (-0,1% del PIB) y los municipios (-0,2%). Gobierno y comunidades han acordado que se vaya corrigiendo este desfase para que en 2008 se anule completamente. En estos momentos hay cinco planes de saneamiento autonómicos y varios municipales activados (entre ellos el del ayuntamiento de Madrid) para corregir esta situación.