El futuro de la sanidad, en manos de la tecnología
La sanidad española se enfrenta a una transformación tecnológica para dar al ciudadano el mismo servicio esté donde esté. El reto es el consenso político
La sanidad española ha acelerado el uso de las tecnologías de la información y las telecomunicaciones. Las 17 Comunidades Autónomas han desplegado, con diferente grado de implantación, planes en esta dirección y, a este esfuerzo, se suma ahora el proyecto Sanidad en Línea, impulsado por los Ministerios de Sanidad e Industria. Este trata de aprovechar el potencial de las nuevas tecnologías para mejorar la atención sanitaria que se presta a los ciudadanos y garantizar la movilidad geográfica de los pacientes por todo el territorio nacional.
La iniciativa, cofinanciada por el Gobierno central y las CC AA, forma parte del Plan Avanza para converger con Europa en materia tecnológica y contempla la puesta en marcha de la tarjeta única sanitaria, la receta electrónica, la cita médica por internet y la historia clínica electrónica. El proyecto ha recibido elogios. Pero todos los implicados en esta tarea son conscientes de que el proceso es 'costoso y de largo recorrido', como reconocieron los nueve participantes del encuentro informativo sobre Sanidad: Servicios Públicos Digitales, organizado esta semana por la compañía T-Systems, el ente público Red.es y CincoDías.
'Hablamos de cooperación, de integración y de conocimiento compartido, y nos enfrentamos a una gestión del cambio en toda la organización sanitaria de gran dimensión', señaló Pilar Polo, gerente de Sanidad de Red.es, dependiente del Ministerio de Industria. Polo advirtió que 'estamos en el comienzo de una gran transformación con un umbral de complejidad muy grande'. Y es que basta ver las cifras que mueve la sanidad española para hacerse una idea. El Servicio Nacional de Salud dio cobertura en 2005 a más de 43 millones de habitantes, 300 millones de consultas en asistencia primaria y 70 millones con especialistas, cinco millones de altas hospitalarias, cuatro millones de actos quirúrgicos, se atendieron 24 millones de urgencias, 4.000 trasplantes (en cada uno pueden llegar a participar hasta 100 personas)... y todo con la implicación de 500.000 profesionales, 2.700 centros de salud y 774 hospitales.
Pilar Conesa, directora general del Sector Público y Sanidad de T-Systems, cree que el avance en las comunicaciones y en el tratamiento de la imagen digital permiten plantear una transformación en la sanidad que de respuesta a la movilidad de pacientes y profesionales, que evite los desplazamientos a los pacientes crónicos y dependientes y lleve al médico especialista a cualquier lugar de manera virtual. 'Es un camino de sí o sí. Y la clave está en la interoperabilidad; resolver cómo se comparte información entre los distintos sistemas de las diferentes autonomías, un reto similar al planteado en Europa', subrayó. Esta experta destacó la necesidad de crear una identificación del paciente unívoca y una interoperabilidad tanto técnica -'compleja pero fácilmente resoluble'- y semántica, 'porque hemos de ponernos de acuerdo en qué información consideramos básica para vincularla a la historia clínica'. Según Conesa, es urgente definir un marco que permita avanzar en lo que será esa interconexión entre las diferentes autonomías. 'Hay que definir los estándares y crear una capa que permita esa conexión de forma no invasiva', matizó la directiva de T-Systems, quien explicó que la sanidad es uno de los tres ejes estratégicos de su compañía para los próximos años.
La Consejera de Salud y Consumo de la Diputación General de Aragón, Luisa María Noeno, coincidió en que el momento que está viviendo la sanidad española es 'increíblemente importante', pero indicó que estos cambios suponen un reto interno para la organización, que tiene que cambiar su forma de actuar. 'Tenemos que trabajar con un marketing externo de confianza de los ciudadanos y contar con el liderazgo de profesionales que están en la clínica, la admisión o la gestión para que convenzan a los de fuera y a los de dentro', dijo.
Noeno, que destacó la seguridad de la información sanitaria en soportes informáticos por encima de los datos en papel, dijo que la clave es 'el impulso político, porque si lo hay, el dinero al final viene'. Su comunidad, por ejemplo, cuenta con una inversión de 80 millones de euros hasta 2011 dentro del Plan de Sistemas y Telemedicina y, entre otros avances, ha obtenido financiación para instalar sistemas de videoconferencia en todos los centros de salud y eliminar los problemas de no movilidad de paciente y especialista si no hace falta.
Carlos Royo, responsable de sistemas de información de Defensa, animó a acelerar el proceso. Señaló que la tecnología es barata y que va muy por delante del proceso asistencial. 'El ciudadano se mueve y no tiene sentido que si yo tengo una historia clínica digitalizada con mis datos en Guadalajara no sepan en Zaragoza quién soy ni qué me pasa', criticó. Y resumió: 'Tenemos tecnología del siglo XXI, con procedimientos administrativos del XIX y con una cultura médica organizacional del siglo V antes de Cristo. No es un problema tecnológico sino de todo lo demás'.
Royo pidió consenso político para dar una respuesta a la demanda de los ciudadanos que reclaman la posibilidad de ser atendidos en cualquier lugar. 'Si no lo hacemos corremos el riesgo de que elijan salirse del sistema sanitario y cuelguen su información médica en internet como está sucediendo en EE UU. Igualmente pidió más presupuestos. 'Se habla de inversiones importantes, pero estamos usando calderilla. La mayoría de las comunidades están utilizando el 1% del presupuesto sanitario para tecnología'. Este experto pidió cambiar la cultura organizacional. 'El fin es que entendamos que la información es el recurso estratégico que vamos a tener en la sanidad. Ahora tenemos datos, que hay que convertir en información y en conocimiento y estamos a años luz de ello. Y la tecnología es el único instrumento que nos lo permite hacer'.
José Manuel Peña, secretario general de la consejería de Sanidad de la Xunta de Galicia, se mostró más pesimista porque 'falta el consenso político que requiere el tema' y porque la sanidad se ve desde las consejerías de economía como gasto. 'Casi ninguna medida se ve como un motor de desarrollo económico, cuando el sector sanitario lo es en términos de empleo y de actividad económica y tenemos que hacerlo visible', dijo.
Peña, que ve también necesario pisar el acelerador, quiso llamar la atención sobre la construcción del sistema nacional de salud. 'Hay que decir que a la sanidad en línea no se le puede pedir lo que no le corresponde. Tiene un carácter instrumental, es una herramienta que ayudará a redefinir el sistema nacional de salud, pero el consejo interterritorial del sistema de salud debe asumir el desafío y no está dando los resultados que debe de pedírsele en cuanto a la definición de prestaciones, de cartera de servicio y sí está asumiendo elementos que descomponen el sistema como puede ser el del calendario vacunal'.
Modelo descentralizado
José Luis Rocha, secretario general de Calidad y Modernización de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía, advirtió que la tecnología tiene un carácter instrumental cuyo objetivo final es la satisfacción del paciente. 'Es clave tenerlo en cuenta porque si no nos podemos perder en la fascinación de la tecnología y se corre el riesgo de caer en la decepción', dijo Rocha, quien añadió que los avances tecnológicos deben contribuir a la equidad y la solidaridad.
'Se echa de menos la existencia de un plan estratégico nacional que establezca las reglas de la relación de las comunidades autónomas', asegura Luciano Sáez, director de la Sociedad Española de Informática de la Salud (SEIS).
Jesús García Marcos, subdirector general de TI de la Secretaría General Técnica del Ministerio de Sanidad, pidió a las comunidades autónomas que hagan un esfuerzo para ponerse de acuerdo en las políticas de desarrollo tecnológico: 'Siempre estamos enfrentados, pero a pesar de esta oposición se avanza'. El representante del ministerio tuvo también críticas para algunas asociaciones que con su discurso están frenando el avance de los acuerdos en materia de seguridad sobre los datos de los pacientes. En esta línea, Andrés Carrillo, director general de Régimen Económico y Prestaciones del Servicio Murciano de la Salud, recordó que el dueño de la información sanitaria es el ciudadano y que a éste habrá que facilitarle el acceso a la misma, con el uso de una tarjeta inteligente por ejemplo, para que la emplee de la forma que quiera.
Los últimos avances de las autonomías
Las comunidades autónomas ya se están beneficiando de la implantación de la tecnología, según sus representantes. Carlos Royo dijo que durante su gestión en la sanidad de Castilla-La Mancha, 'por cada euro invertido en proyectos iconos ahorramos seis euros en placas radiológicas', y añadió que con la prescripción electrónica se ahorraron 100 millones en recetas médicas'.Andrés Carrillo afirmó que desde 2002 se han invertido 60 millones de euros en el plan de informatización sanitaria en la región de Murcia. 'Tenemos informatizados el 100% de los centros de salud y ya está digitalizado el 95% de los historiales', dijo Carrillo, quien añadió que en el plazo de dos meses, toda la población podrá acogerse a la 'cita web'.José Luis Rocha aseguró que los andaluces ya perciben la utilidad de la modernización. 'Los enfermos y los médicos ya pueden comunicarse por correo electrónico', dijo. Rocha señaló que el Programa Diraya ha logrado que seis de los ocho millones de habitantes de la comunidad tengan ya digitalizados sus historiales clínicos. Además, un 30% de la población ya usa la receta electrónica mientras que han logrado reducirse las visitas médicas más un 22%.Luisa María Noeno explicó que el Gobierno aragonés ha impulsado la construcción y desarrollo de un edificio tecnológico en el Parque Walqa de Huesca en el que se ha instalado todo el hosting del sistema de salud además del centro de ayuda telefónica. En ese punto se centralizarán las agendas de todos los sanitarios, un escenario que permitirá a los paciente conocer las opciones y pedir cita.A su vez, José Manuel Peña defendió que, por primera vez, la Xunta de Galicia, ha introducido la sanidad en los planes de I+D+i. Además, explicó que su administración ha puesto en marcha planes ambiciosos como el desarrollo de un centro de información y de soporte tecnológico del Sistema de Salud de Galicia y un biocluster de la salud.