Escándalo en Siemens

Hace falta tener un gran grupo para meterse en un lío como este. Siemens hará su propia estimación sobre la supuesta malversación investigada por los fiscales. Ha dicho que serán examinados pagos considerados sospechosos, hechos desde 1999, por valor de 420 millones de euros (...).

Siemens ha esperado a estar al borde de la expulsión de Transparency International, un organismo de control anticorrupción, para reconocer que sus mecanismos de control necesitaban una seria revisión. El lunes nombró a un nuevo consejero de conformidad y dijo que una empresa externa revisaría sus sistemas (...).

Hay dos asuntos sobre los que el empresariado alemán debería reflexionar. El primero es la transparencia. El principal informe sobre lo que estaba pasando con Siemens salió a la luz cuando el grupo tuvo que rellenar un formulario para la Comisión de Seguridad e Intercambio de EE UU (...). El segundo es la estructura (...). El presidente de la junta de revisión de Siemens es Heinrich von Pierer, consejero delegado del grupo de 1992 a 2005 (...).

Alemania ha progresado mucho en la última década al modernizar su marco de gobierno corporativo. El caso Siemens debería servir de llamada de atención para las empresas que aún no han implementado ninguno de estos cambios.