América Latina, entre populismo y pragmatismo

Hugo Chávez en Venezuela, unas semanas tras Lula en Brasil. Con la notoria excepción de México, tras la victoria de Felipe Calderón, las once presidenciales del año confirman el gran giro hacia la izquierda de Latinoamérica. Queda por ver qué tipo de izquierda es (...).

El cambio de dirección de todo el continente tiene un hilo conductor: las frustraciones acumuladas durante años de austeridad y de reformas y de las que se responsabiliza a Washington.

Tras los estragos de la década perdida de la deuda, los años noventa fueron los de la recuperación de las finanzas públicas, de las privatizaciones y del libre comercio. Unos esfuerzos de saneamiento (...) que no acabaron ni con la corrupción ni con la pobreza (...).

Nuevas medidas hacen retroceder la pobreza, pero demasiado lentamente para los electores y los partidos. Es el caso en Brasil y Venezuela. La actividad se reanuda en Argentina. Y, si las diatribas de alguien como Chávez asustan (...), esconden un pragmatismo en la gestión económica (...).

Sin embargo, petropopulistas o socialdemócratas prudentes, los presidentes latinoamericanos todavía no han respondido a (...) la urgencia de (...) mejorar las infraestructuras, la salud y la educación. Esas garantías de competitividad y prosperidad a largo plazo.

Françoise Crouïgneau, en Les æpermil;chos, París