Los mercados recobran la tranquilidad y moderan las pérdidas
Persiste la preocupación, pero la intensidad va siendo menor. Las Bolsas europeas volvieron a caer, aunque no se vio la oleada de ventas de la sesión anterior. El Ibex cedió un 0,40%, hasta 13.732,10 puntos.
Las pérdidas continuaron ayer en Europa, aunque con menor intensidad que en la jornada anterior; el Ibex cayó el 0,40%, el que más. Son ya cuatro días con cierre negativo que le han supuesto al mercado español perder 562,50 puntos, un 3,94% en términos relativos. Es, prácticamente, lo que llegó a ganar en el mes, cuando tocó el récord en 14.294,60. 'Desde julio hemos subido 2.500 puntos. Es un momento interesante para pensar en hacer caja en los valores que hayan subido mucho y mantener los que aún pueden mejorar', comenta Javier Barrio, de BPI. Y eso es precisamente lo que están haciendo los inversores. Santander (-5,84%), BBVA (-6,60%) y Telefónica (-3,30%) han restado con sus descensos 337 puntos al Ibex en estas últimas cuatro sesiones. Pero desde sus mínimos anuales estos valores suben el 28,3%, 22% y 28%, respectivamente.
Iberdrola fue el lastre de la última jornada. Cayó el 2,11% tras conocerse que pagará 17.200 millones por la británica Scottish Power.
El recorte de las Bolsas se inició el jueves, aparentemente en un 'momento en el que nadie lo esperaba', en palabras de Barrio. Efectivamente era una sesión peculiar con el festivo precisamente ese día de Wall Street y sin noticias que lo justificaran. Los argumentos para vender llegaron después: el euro y el probable enfriamiento económico.
La divisa europea ha saltado en noviembre desde 1,2762 dólares a 1,3177, aunque ya llevaba acumulada una revalorización del 8% en los 10 primeros meses del año. 'Las ventas en Bolsa se excusaron al principio con la escalada del euro. Sin embargo, los últimos informes económicos apuntan a que un rango correcto de paridad entre las dos monedas está entre 1,26 y 1,32', indica Luis Benguerel, de Interbrokers.
El euro cotiza en máximos de 20 meses mientras crecen las especulaciones que apuntan a que el BCE subirá los tipos de interés en la próxima reunión de diciembre. De hecho, la apreciación de la divisa europea ha espoleado la demanda de opciones sobre el activo monetario, donde los intermediarios están pagando los precios más altos desde diciembre de 2003.
En medio de estas previsiones, la OCDE ha advertido que el euro seguirá siendo un problema importante para la eurozona, aunque espera que el PIB continúe al 2,5% en los próximos dos años.
La visión para Estados Unidos es más preocupante, ya que la institución ha bajado las previsiones para 2007 del 3,1% al 2,4%. La preocupación por el enfriamiento económico se reforzó ayer tras conocer que los pedidos de bienes duraderos han caído al nivel más bajo de 2000. El dato provocó una apertura a la baja en Wall Street. Los índices, sin embargo, enmendaron la sesión enseguida y la mejora repercutió positivamente en Europa, que redujo considerablemente las pérdidas que acumulaban en la mañana. No superaron en ningún caso el 1%. Por su parte, el Dow Jones, el S&P y el Nasdaq subieron el 0,12%, 0,35% y 0,28%. El presidente de la Fed, Ben Bernanke, tranquilizó en parte a los inversores al asegurar ante la National Italian American Foundation de Nueva York que la economía seguirá creciendo a un ritmo moderado, aunque la inflación está en un nivel 'incómodamente alto'.