Los mayores accionistas del BPI rompen su pacto defensivo tras 13 años
Los principales accionistas del Banco Portugués de Inversiones (BPI), entre los que figura La Caixa, han revocado el contrato que tenían suscrito para tener preferencia en la compra de acciones de esta entidad si alguno de los integrantes del acuerdo decidía vender su participación.
Según un comunicado remitido ayer a la CNMV lusa, La Caixa, Itaú, Arsopi y otros accionistas dejan ahora sin vigor este pacto que se remonta a 1993.
Poco antes del anuncio, la Bolsa de Lisboa suspendió durante casi media hora la cotización de BPI. Tras reanudarse su negociación, la entidad portuguesa despidió la jornada con una subida del 0,34%, hasta alcanzar los 5,92 euros.
El Banco Comercial Portugués (BCP), participado por el también español Banco Sabadell, lanzó el pasado 13 de marzo una opa hostil sobre BPI a 5,7 euros por acción, lo que supone valorar esta última entidad en 4.330 millones de euros.
Desde entonces, La Caixa, que siempre ha manifestado su interés por el mercado portugués, ha ido incrementando su participación en BPI. El pasado viernes, la caja de ahorros comunicó a la bolsa portuguesa que había alcanzado un 22,8% del capital social, después de que su filial Caixa Holding adquiriera un paquete de más de 13 millones de títulos. Con ello, La Caixa pasa a tener en su poder 'indirectamente' 173,2 millones de acciones de BPI, lo que representa el 22,797% del capital y el 23,155% de los derechos de voto.
Hace unas semanas, el presidente de BPI, Fernando Ulrich, criticó la existencia de presiones del Ejecutivo luso sobre el catalán para que interceda a favor de que La Caixa respalde la opa hostil de BCP.