Kroes expedienta a Eon por violar los precintos de una inspección
La Comisión Europea ha expedientado Eon por violar los precintos dejados por funcionarios comunitarios durante un registro de sus dependencias. Bruselas puede imponer a la compañía alemana una multa de hasta 232 millones.
El expediente ha causado sorpresa incluso entre los abogados más curtidos en derecho de la competencia. 'No es un caso muy habitual, por dos razones', explica Álvaro Ramos, del despacho de abogados Howrey. 'Primero, porque es raro que alguien rompa los precintos. Y segundo, porque hasta hace poco, la Comisión no tenía el poder de precintar oficinas'.
Los especialistas en competencia recuerdan que con el antiguo Reglamento sobre aplicación de las normas comunitarias de competencia se podían romper impunemente los precintos de la CE, suponiendo que los funcionarios llegaran a utilizarlos.
Pero esa situación, mal que le pese a Eon, cambió con la entrada en vigor del nuevo Reglamento el 1 de mayo de 2004. 'Al hacerse cada vez más difícil la detección de las infracciones de las normas de competencia (...) resulta necesario completar los poderes de investigación de la Comisión', advertía la introducción de ese texto legal.
Y en su artículo 20 facultaba a la CE, por primera vez en la historia de la política comunitaria de competencia, 'para colocar precintos en cualquiera de los locales y libros o documentación de la empresa durante el tiempo necesario'.
El Reglamento castiga con severidad la violación de esos precintos, porque garantizan que la empresa investigada no manipula la información donde los funcionarios buscan pruebas de alguna infracción a las normas de competencia.
Las multas pueden alcanzar hasta el 1% de la facturación del último ejercicio. En el caso de la eléctrica alemana, la inspección se produjo en su división Eon-Energie, que cuenta con más de 15 millones de clientes de gas y electricidad en toda Europa y cuya sede se encuentra en Múnich. La facturación de Eon en 2005 ascendió, según su memoria anual, a 23.246 millones de euros, por lo que sanción podría superar los 200 millones.
Bruselas, sin embargo, no suele apurar su margen sancionador. Pero las inspecciones a Eon, según diversas fuentes, estaban vinculadas a una investigación sobre la falta de competencia en el sector energético, lo cual, de confirmase, podría suponer para Eon otras multas aún mayores. La compañía optó ayer por no hacer comentarios sobre el expediente.