El conflicto de Ryanair se recrudece tras convocar CCOO ocho jornadas de huelga
El sindicato CC OO ha decidido llevar a cabo nuevas protestas del personal de tierra de Ryanair y en su empresa contratada para el handling, Lesma, en los 13 aeropuertos donde opera. 'La dirección ha demostrado no reconocer el conflicto, ni a sus representantes sindicales', dicen en CC OO. Serán ocho jornadas de huelga (los lunes de noviembre y el 5, 13, 22 y 26 de diciembre) para intentar que se cumpla el convenio.
La postura férrea que ha adoptado Ryanair ante el conflicto de personal de tierra, ha obligado a CC OO a poner en marcha un plan de protestas que comenzará el próximo día 6 de noviembre y se repetirán todos los lunes de noviembre y el 5, 13, 22 y 26 de diciembre según fuentes sindicales. Serán ocho jornadas de 24 horas en todos los aeropuertos donde opera Ryanair, y en su empresa de handling Lesma. Con ellas, CC OO exigirá a la dirección que cumpla con el convenio colectivo firmado el pasado año en materia de horarios y seguridad de los trabajadores y pasajeros.
'Sabemos que la estrategia de la empresa de ignorar el conflicto parece que será a largo plazo', explica Rómulo Silva, del sector de transporte de CC OO. æpermil;ste argumenta que la dirección no acepta a los sindicatos y no pone la situación fácil para que se forme un comité de empresa de empleados en sus centros de trabajo. 'Para esta aerolínea todo lo que no está prohibido, está permitido', explica, y con esa premisa hace sus cábalas para que no sea obligatoria la formación de un grupo de trabajadores que represente al resto. 'Nosotros tenemos 35 delegados sindicales en la empresa y por ley perseguimos que se cumplan los derechos de los trabajadores', añade Silva.
Postura de la empresa
La compañía irlandesa sigue pensando que cumple el convenio colectivo y que no hay nada que negociar. 'Nosotros acordamos todas las condiciones laborales con un grupo de empleados que han sido también elegidos democráticamente; además, creemos que la gran mayoría de la plantilla no apoya estas protestas y que sólo lo hace menos del 5%', dijo ayer su directora de marketing, Maribel Rodríguez.
En octubre, se han venido sucediendo diferentes protestas, convocadas por CC OO, en los aeropuertos de España donde opera esta aerolínea de bajo coste. A juicio del sindicato, las movilizaciones han tenido un respaldo de la plantilla, hasta del 95%, en algunos aeropuertos como Gerona, Jerez o Santiago.
La compañía dice que si persisten las protestas, se verá obligada a revisar sus rutas en estos destinos conflictivos. 'Ante todo, nosotros queremos que los pasajeros tengan un buen servicio y si no es así, tendremos que pensar en cesar la actividad en ciertos puntos', añadió Rodríguez.
El sindicato considera que esta estrategia empresarial es la que sigue la compañía en todos los países y que 'su baza es la de amenazar con retirar rutas, presionando a las comunidades autónomas y organismos locales, interesados en que su destino se desarrolle con estos vuelos', apuntan en el sindicato. 'Nosotros también trasladaremos a estos organismos públicos que aportan dinero a la compañía que tengan en cuenta la política laboral que practica esta empresa'.
La Generalitat, por ejemplo, da 2,5 millones de euros de subvenciones al año a esta aerolínea por operar desde Gerona. Aquí la compañía irlandesa tiene su mayor centro de operaciones.
O'Leary llega el jueves
Por primera vez, el polémico, y a veces provocador director general de Ryanair, Michael O'Leary, vendrá el jueves a Madrid a presentarse a los medios de comunicación. Entre otras cosas, el defensor del vuelo gratis explicará sus intenciones en España, y comentará los planes más inmediatos para su nueva base de operaciones que abrirá en la capital. Ryanair pretende hacerse hueco entre sus competidores más cercanos, como Easyjet (que también creará un centro en Madrid), y duplicar el tráfico de pasajeros. Inaugurará rutas hacia Europa para lo que lanzará billetes a menos de un euro más tasas. La filosofía comercial de O'Leary ha dado a más de una compañía regular serios quebraderos de cabeza. O'Leary afirma que en diez años volar será gratis. En su opinión, el precio del billete es lo de menos para financiar una aerolínea. La clave está en aumentar el número de visitantes de un destino y cobrar subvenciones públicas.