Las compañías apuestan por combinar pólizas de dependencia con otros seguros
Recién aprobada la Ley de Dependencia, el sector asegurador ve complicada la venta de pólizas destinadas a complementar las coberturas públicas que ofrecerán los distintos niveles de la Administración a las personas dependientes. Una salida que plantea es combinar estas cobertura con otros productos.
'Si hoy, cuando el Estado no da nada, la gente no contrata seguros de dependencia, ¿por qué comenzará a hacerlo cuando existan ayudas?'. Esta era la pregunta retórica que se realizaba ayer Teótimo Sáez, secretario general de Adeslas y presidente de la agrupación de seguros de enfermedad de la patronal Unespa, durante la celebración de unas jornadas organizadas por Caser y la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD).
Minutos antes, Ernesto Sanz, director de vida y pensiones de Caser, reflexionaba sobre el panorama que confronta el sector. 'Las compañías tenemos que ver cómo diseñamos las pólizas de dependencia. Si fuesen seguros complementarios a los productos que ya existen de salud o pensiones, serían más fáciles de vender'.
No obstante, como reconoció el propio ejecutivo, esta alternativa plantea dificultades a la hora de fijar qué parte de la póliza es susceptible de una deducción en el impuesto de la renta bajo el concepto de previsión frente a la dependencia, y cuál no.
En opinión del directivo de Caser, otro desafío al que se enfrentan las compañías aseguradoras es 'diseñar y comercializar los productos con absoluta transparencia, porque los usuarios no se pueden defender igual que un cliente normal debido a que sus capacidades están mermadas al tratarse de personas aquejadas de una dependencia grave o severa'.
Para Teótimo Sáez, 'la tarea comercial de las entidades aseguradoras es muy complicada porque el ciudadano medio no es consciente de que el paraguas público frente a la dependencia es pequeño, de que no cubre todo'. Por eso, prosiguió el directivo, 'el seguro de ahorro lo tiene mucho más fácil que el seguro de riesgo. No tengo ninguna duda, pero pueden crearse productos mixtos'.
Sáez reconoció que 'es mejor tener una ley de cobertura de dependencia, aún con sus imperfecciones, que no tener ninguna'. En opinión del secretario general de Adeslas, la norma 'no apuesta por dar un papel específico al seguro privado al no fijar mecanismos que estimulen la contratación de pólizas'.