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Previsiones

La Caixa prepara su plan exterior desde Portugal y Francia

Será la primera caja en formar una enseña fuera de España

La Caixa ultima la desinversión de sus participaciones bancarias fuera de España. Ha salido ya del capital del brasileño Itaú, de CaixaBank en Francia y de CaixaBank Andorra. Un año antes se fue del alemán Deutsche Bank. Este repliegue, motivado en parte por las recomendaciones del Banco de España, es el paso previo para abordar un giro en su estrategia internacional. Quiere convertirse en la primera caja de ahorros en apostar por crecer con su propia red en el extranjero. Esta apuesta está incluida en su plan establecido para los próximos cuatro años, y que persigue duplicar el beneficio recurrente.

Las tres ventas citadas aportarán este año unas plusvalías del orden de 520 millones. El presidente de la primera caja española, Ricard Fornesa, aseguró el jueves pasado que 'podrá haber alguna desinversión más', refiriéndose a la presencia de la caja en Banco Sabadell y a la cartera empresarial que no forma parte del núcleo duro, formado por las participaciones en Telefónica, Repsol, Gas Natural, Agbar y Abertis.

Esta posible enajenación de activos (Occidental Hoteles está en venta desde hace tiempo y la presencia de la entidad en Port Aventura tampoco se considera estratégica) contribuirá a la financiación del próximo plan cuatrienal, según reconoció el director general de La Caixa, Isidre Fainé.

En realidad, el cambio de estrategia de la entidad en el extranjero responde a la necesidad de ofrecer los mismos servicios a empresas y particulares que da en España. Para Fainé, 'debemos seguir a nuestros clientes en todos los mercados'. Además, este planteamiento se ve reforzado por el pujante mercado de los servicios para clientes inmigrados, especialmente las remesas que envían a sus países de origen.

Este plan difiere del seguido hasta el momento, consistente en salir al extranjero para captar nuevos clientes locales. El propio Ricard Fornesa admitió que CaixaBank cosechaba pérdidas cuando optó por su venta a Boursorama (Société Générale), a cambio de una participación del 20%. Ahora, la nueva estructura en Francia 'va por buen camino', aseguró Fornesa. Boursorama se ha centrado en banca online. La Caixa emprenderá el crecimiento internacional desde Francia y Portugal. En este último, cuenta con una participación de casi el 20% en BPI. A partir de aquí, la entidad está analizando los países y mercados donde sería necesario crecer a base de sucursales propias. Actualmente, la caja mantiene una red de ocho oficinas de representación en Pekín (China), Londres (Gran Bretaña), Bruselas (Bélgica), Milán (Italia), Stuttgart (Alemania), Lisboa y Oporto (Portugal) y Casablanca (Marruecos). A estos establecimientos hay que añadir la próxima que abrirá en Polonia.

En un segundo plano existe la posibilidad de adquirir algún banco, que podría financiarse con las elevadas plusvalías que la entidad posee.

Crea el único banco de microcréditos nacional

El giro social que Fornesa imprimió a la obra social al acceder a la presidencia aumentará en los próximos cuatro años. Así, anunció en la asamblea extraordinaria de esta semana que la entidad destinará 300 millones de euros en este periodo para combatir la pobreza.En concreto, el presupuesto para 2007 alcanzará un 16% de los 375 millones totales para la obra social. Estas iniciativas se complementarán con el resto de programas sociales (vivienda asequible, juventud, dependencia, cooperación internacional, inmigración, violencia, etc.).La entidad también pretende potenciar la concesión de microcréditos, hasta el punto que aprovechará la ficha bancaria de Banco de Europa, actualmente en desuso, para especializarlo en este tipo de actividad.

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