Air China recoge el testigo de los vuelos a España
A partir de noviembre, no habrá vuelos directos a China operados por aerolíneas españolas. La única compañía que realizaba estos trayectos, Air Europa, dejará de volar entre Madrid y Pekín el próximo 30 de octubre. La compañía alega falta de rentabilidad y excesivos costes en estas conexiones. También su rival Air Plus Comet decidió retirarse de este destino hace unos meses por las mismas razones.
Este vacío de vuelos va a ser aprovechado por Air China. La principal aerolínea del país asiático comenzará a operar vuelos directos desde Pekín que unirá directamente con Madrid en dos frecuencias semanales ( jueves y domingo) a partir del 10 diciembre. El vuelo unirá, además, Madrid con São Paulo (Brasil). 'El hecho de que este nuevo vuelo enlace dos destinos, compensará los elevados costes de operatividad y el riesgo económico de estas rutas', explica Yamin Liu, portavoz de la Oficina China de Turismo en España.
De este modo, Air China será la única aerolínea que una Madrid con Pekín sin escalas. El resto de compañías -Iberia, Spanair o Air Europa- conectan aquellos destinos a través de ciudades como Londres (British Airways), Fráncfort (Lufthansa) o París (Air France).
Air Europa empezó hace un año y medio con cuatro frecuencias y dos rutas (Pekín y Shanghai) que luego amplió a seis para luego fijar su actividad en dos únicas frecuencias. Los elevados gastos empañaron los resultados de esta filial del grupo Globalia y obligaron a sus responsables a dar marcha atrás, pese a la enorme apuesta inicial. El primer vuelo de Air Europa, un Airbus A330 denominado Pedro Duque, pisó suelo pekinés en mayo de 2005, con el apoyo gubernamental. El entonces ministro de Industria, José Montilla, y la titular de Fomento, Magdalena Álvarez, acompañaron a la aerolínea en su viaje oficial con el propósito de aumentar las negociaciones comerciales entre ambos países.
Globalia cree que su decisión está muy pensada. Los elevados precios de carburante, y de servicios de tierra en aquel país han dado al traste con sus ilusiones. Sin embargo, la compañía seguirá comercializando este destino a través de su filial mayorista Travelplán y sus agencias de viajes Halcón. También continuará vendiendo paquetes en los que incluye la estancia de hotel y el vuelo.
Air Plus Comet, aerolínea de los propietarios de Marsans, unió España con el país asiático en cuatro vuelos que más tarde redujo a dos, y que finalmente dejó en una ruta Madrid-Shanghai. Hace unos meses, también anunció el cierre de este trayecto por falta de rentabilidad.
El turismo a China crece un 84,5%
La retirada de ambas compañías españolas de las rutas chinas frustra la ansiada carrera por estar en este destino de gran potencial turístico. El año pasado, 56.000 chinos eligieron España como lugar para pasar sus vacaciones. Desde España, 111.000 personas volaron hacia el país asiático, según la Oficina de Turismo de China en España. 'Este tráfico crece al ritmo del 84,5% anual, y todo apunta a que se mantenga en el futuro pese a la retirada de las aerolíneas españolas', dice Yamin Liu. 'Seguirán viajando allí a través de los nuevos vuelos de Air China, mediante la contratación de paquetes turísticos y en aerolíneas europeas que hagan escala', comenta.Cada vez hay más españoles que van a China por negocios y para pasar sus vacaciones. A esto hay que añadir la gran cantidad de familias que se desplazan allí con el fin de adoptar un niño. El creciente tráfico entre ambos países hará replantearse a las compañías su estrategia para estar presente, pese a los elevados costes de vuelo y después de ganar, además, la larga batalla a las autoridades de aquel país para poder entrar en sus cielos.