Avanza el empleo de los 'mileuristas'

Todos los registros oficiales revelan un fuerte crecimiento de la ocupación en los últimos años. Pero el que mejor recoge los movimientos del empleo y su verdadero coste es el Ministerio de Hacienda, que cobra de inmediato las retenciones sobre las rentas laborales devengadas por los trabajadores. En 2005, último registro cerrado sobre empleo en las fuentes tributarias, había 14,9 millones de asalariados regulares, de los que 937.000 llegaron al mercado de trabajo precisamente en 2005. Estas cifras sólo hablan del dinamismo del mercado, que incrementó un 6,7% sus efectivos. Sin embargo, el auténtico valor está en su componente analítico.

La remuneración media de todos los trabajadores fue de sólo 16.000 euros al año en 2005, con un avance del 2,3%. Pero la cuantía media registrada por Hacienda para los nuevos entrantes es menor: es inferior a 2 veces el salario mínimo del año, o lo que es lo mismo, menos de 14.364 euros al año. Pero unos 638.000 nuevos empleados cobraron menos del salario mínimo interprofesional: 513 euros al mes o 7.182 al año.

Estas cifras confirman el imparable avance del mileurismo salarial, fenómeno que registra la creciente presencia de remuneraciones que no superan los mil euros al mes. Es un comportamiento habitual en todos los mercados de trabajo, que pagan menos a los trabajadores recién llegados que a los ya instalados. Pero en España las propias estadísticas de Hacienda, y las de Seguridad Social también, admiten un descenso de los trabajadores con salarios altos y un avance de los más modestos. Este cambio tiene relación directa con la masiva llegada de inmigrantes, que ha presionado a la baja los sueldos, y que ha entregado a los empresarios un mayor margen de maniobra en las actividades de los servicios de baja cualificación y en la construcción, en lo que puede considerarse una auténtica reforma laboral radical y silenciosa. El mercado de trabajo se ha hecho más ancho, pero con menores rentas, además de aportar productividades agregadas decrecientes, que deberían corregirse.