EE UU cierra el ejercicio fiscal con el menor déficit en cuatro años
EE UU registró un déficit presupuestario de 247.700 millones de dólares en el año 2006. El ejercicio, cerrado el 30 de septiembre, muestra unos números rojos inferiores en un 22,3% a los de 2005. Es el déficit más bajo de los últimos cuatro años, algo que llevó ayer al presidente George W. Bush a decir que ha cumplido, 'con tres años de adelanto', su promesa de reducir a la mitad el de 2004.
El departamento del Tesoro, que hizo ayer público estos datos, no dijo cuánto representa este déficit como porcentaje de la economía, aunque la Oficina Presupuestaria del Congreso, que la semana pasada calculó este agujero en 250.000 millones de dólares, apuntó que esta cifra suponía el 1,9% del PIB frente al 2,6% que supusieron los 319.000 millones de déficit de 2005.
La clave de la mejora está en una subida del 11,8% de los ingresos. Es un incremento esperado, cuando la economía crece a un ritmo del 3,3% y ha habido elevados beneficios empresariales, pero el peso de los gastos sigue siendo muy fuerte y creció a un ritmo del 7,3%.
A pesar de las buenas noticias, los analistas no descorcharon el champán. Por un lado porque se incluyen partidas que corresponden a gastos comprometidos con futuras pensiones. Por otro, consideran que con la expectativa de crecimiento rebajada al 2,6% en 2007, la recuperación del déficit puede ser temporal dado que el gasto no se ha recortado y los ingresos son cada vez menos predecibles y más dependientes del ciclo económico.
En Goldman Sachs calculan que con el gasto del gobierno aún en ascenso y un menor crecimiento, el déficit puede llegar a los 300.000 millones para el próximo año fiscal y a 400.000 antes de que Bush deje la Casa Blanca en 2009.
En el Gobierno, se prefiere mirar al pasado mejor que al futuro, ya que el déficit está por debajo de los 296.000 millones de dólares que calculó la Casa Blanca en julio. Estos a su vez estaban por debajo de los 423.000 estimados meses antes.
Votos y popularidad
¦bull; Queda menos de un mes para las elecciones al Congreso, y George Bush comenzó ayer una rueda de prensa hablando de la reducción del déficit. Pero estos números nunca han preocupado a los votantes. Irak es lo que lastra desde hace meses su popularidad.