Perú tiende la mano a Telefónica en la disputa por la cuota de abono
El escenario no está ni mucho menos despejado. Es más, la cuota de abono de Telefónica en Perú está más amenazada que nunca. Pero el Gobierno quiere negociar. Ha tendido la mano y hará propuestas para endulzar la eliminación de este pago.
El Gobierno de Perú ha intentado en todo momento nadar entre dos aguas en el espinoso conflicto que se ha creado con la aprobación en el Congreso de un proyecto de ley que elimina la cuota de abono mensual de Telefónica. No puede rechazar de plano la propuesta por motivos electorales y de popularidad, pero tampoco quiere enemistarse con la compañía española, que ya ha demostrado que es más que capaz de denunciar a cualquier país ante los tribunales nacionales o de arbitraje internacional.
Por eso, el Ejecutivo no sólo ha creado un grupo de trabajo que servirá de puente con Telefónica, sino que, según se acaba de saber, el cometido que le ha fijado es 'evaluar propuestas' que se le puedan formular a la operadora española en este campo, según el comunicado enviado a la Bolsa peruana.
La información no detalla por dónde pueden ir estas propuestas, pero fuentes conocedoras de la situación aseguran que el Gobierno está intentando llegar a un acuerdo con Telefónica que incluya concesiones que compensen o endulcen la eliminación de la cuota de abono.
Está por ver, con todo, que Telefónica esté dispuesta a llegar a un acuerdo, entre otras cosas porque parece que hay consenso en que el contrato entre la operadora y el Estado peruano recoge específicamente este cobro.
La eliminación sin más del abono mensual sería inconstitucional, según varias fuentes consultadas, así que al Gobierno le interesa que cualquier movimiento que se dé cuente con el beneplácito de Telefónica. El objetivo es evitar que el conflicto termine en los tribunales o, igual que la congelación de tarifas en Argentina, ante el organismo de arbitraje del Banco Mundial.
Alierta cita a los directivos el día 31
Las invitaciones ya están cursadas y los espacios reservados para la macrorreunión que mantendrá el presidente de Telefónica, César Alierta, con los principales directivos de todo el mundo de la compañía, cerca de 1.400.La fecha elegida es, finalmente, el 31 de este mes. Ese día se concentrarán todas las presentaciones y discursos ante los ejecutivos. Sin embargo, Telefónica ha extendido la convocatoria también a la jornada anterior, la del 30, aunque más bien con carácter lúdico y sobre todo para los muchos trabajadores que acudirán a la cita desde Latinoamérica.También vendrán de Europa, ya que se trata de la primera convención de directivos que se hace desde las compras de O2 y Cesky Telecom. Y es que las últimas adquisiciones de la operadora serán uno de los temas importantes de la convocatoria, pero la reorganización de la compañía aprobada este verano será el asunto estrella.Cuando llegue la fecha de la reunión, los ejecutivos de Telefónica llevarán ya dos meses trabajando bajo el nuevo esquema, que ha fusionado las filiales de fijo y móvil de la compañía y ha optado por una segregación por zonas geográficas. Sin embargo, todavía quedan muchas incógnitas, tareas por acometer y reubicaciones que realizar y ahí es donde se espera que Alierta ponga algo de luz. Será la presentación en sociedad de la nueva estructura ante su equipo.