La CE mantiene los expedientes contra España a pesar del nuevo escenario
Bruselas llevará hasta el final sus dos expedientes contra España (por la reforma de la CNE y las condiciones impuestas a Eon), con independencia de los derroteros que tomen las opas sobre Endesa. La CE no quiere dejar que se siente un precedente de un caso que mine su poder como autoridad europea de competencia.
El inesperado asalto de Acciona al capital de Endesa no trastocó ayer los planes de la Comisión Europea. El organismo comunitario, reunido en Estrasburgo, mantuvo el calendario previsto y declaró ilegales 18 de las 19 condiciones impuestas por la Comisión Nacional de la Energía (CNE) a la opa de Eon por la eléctrica española. La compañía alemana, siguiendo el previsible guión, se felicitó por esta decisión.
La Comisión también envió un dictamen motivado al Gobierno español para que en un plazo de dos meses renuncie a la ampliación de poderes de la CNE aprobada el pasado mes de febrero.
Fuentes comunitarias señalaron la firme intención de la Comisión de continuar hasta el final con ambos expedientes, aunque a nadie se le escapa que el enfrentamiento entre Bruselas y Madrid quizá ya no sirva para que Eon se haga con el control de Endesa.
Operaciones comunitarias
La dirección general de Competencia, sin embargo, se muestra decidida a mantener el envite, porque no quiere permitir que la supuesta injerencia del Gobierno español en su jurisdicción siente un peligroso precedente.
Desde que la Unión Europea, en 1989, centralizó en Bruselas la supervisión de las llamadas operaciones de dimensión comunitaria (en estos momentos, las que ocurren entre empresas cuya facturación supera los 5.000 millones de euros), el visto bueno de la Comisión era casi intocable por parte de una autoridad estatal.
Pero en los últimos meses, varios Gobiernos, incluido el español, han desafiado esa competencia exclusiva. Varsovia intentó imponer condiciones a la entrada del banco italiano Unicredito en Polonia, a pesar de que Bruselas había autorizado la operación de compra del banco alemán HVB, incluidas sus filiales polacas.
'La Comisión va a defender su derecho a aplicar las normas europeas de control de fusiones', advirtió ayer la comisaria de Competencia, Neelie Kroes.
Como parte de esa defensa, su departamento contempla la posibilidad de denunciar a España ante el Tribunal de la UE si el Gobierno no acata rápida y completamente su dictamen de ayer anulando las medidas de la CNE.
El vicepresidente del Gobierno, Pedro Solbes, en declaraciones recogidas por la agencia Efe, indicó ayer que el Gobierno tendrá en cuenta el dictamen de Kroes. Pero reconoció que existen todavía discrepancias entre Madrid y Bruselas. Las partes, dijo, están 'más próximas' en unos puntos y 'más distantes' en otros.
'¿Quién es Acciona? ¿Es catalana?'
Debía ser el día en que la Comisión Europea enseñara al Gobierno español quién es la máxima autoridad de competencia en Europa. Pero una empresa desconocida para muchos en Bruselas amargó la demostración de poder del organismo que preside José Manuel Barroso. '¿Quién es Acciona?', preguntaba ayer un funcionario comunitario tras conocer los detalles de la entrada de la empresa en el capital de Endesa. '¿Son catalanes?', insistía otro al escuchar la historia de la familia Entrecanales.La conclusión, en todo caso, parecía inevitable. Como ya ocurriera con Gas Natural, la Comisión observa impotente una operación de consolidación nacional del mercado energético español. Ahora, sin embargo, no parece probable que la comisaria europea de Competencia, Neelie Kroes, vuelva a caer en la tentación de intentar arrebatar el expediente a las autoridades españolas. La batalla que libró y perdió para poder analizar la fusión Gas Natural-Endesa dejó heridas que todavía están por cicatrizar.
Decisión jurídica
¦bull; El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, dijo ayer que la decisión de Bruselas sobre las condiciones de la CNE a la opa de Eon por Endesa 'es una decisión jurídica y nada más', sin ningún mensaje político, según recoge EP.