La industria del automóvil apuesta por modelos más eficientes y ecológicos
Las presiones gubernamentales y sociales están obligando a los fabricantes de automóviles a adaptar los nuevos modelos a las exigencias medioambientales. Nuevos motores y combustibles para alcanzar mayor eficiencia y ser menos agresivos con el entorno.
La etiqueta de ecológico está cobrando creciente importancia entre los fabricantes de automóviles. El endurecimiento de las normativas medioambientales ha provocado que las principales marcas tengan entre sus asuntos pendientes mejorar la eficiencia energética de los vehículos y reducir su impacto en la atmósfera. La evolución parece positiva: las emisiones de CO2 de los coches nuevos han disminuido un 12,4% en 2004 respecto de los niveles de 1995.
Sin embargo, la Comisión Europa estima que este desarrollo es insuficiente. No en vano, el transporte en Europa fue el responsable del 28% de los gases contaminantes emitidos a la atmósfera. De ese porcentaje, el de carretera representa alrededor del 84%. El objetivo de la Unión Europea es reducir entre 2008 y 2009 las emisiones medias por vehículo a 140 gramos por kilómetro, lo que equivale a una reducción del 25% respecto de 1995.
Aunque el nivel real de emisiones de CO2 depende del rendimiento del vehículo y de su utilización por el usuario, la UE va a empezar a gravar los coches más sucios. El Parlamento Europeo respaldó el pasado 28 de agosto la propuesta de directiva comunitaria que elimina el impuesto de matriculación en un plazo máximo de 10 años y lo sustituye por una tasa de circulación calculada con criterios medioambientales, que penaliza a los coches que más contaminen.
Dos de las tres marcas más limpias del mercado europeo son japonesas
Los coches 'verdes'
Las asociaciones europeas de fabricantes ya destacan el apreciable incremento de las matriculaciones de vehículos que emiten 140 gramos o menos por kilómetro (29,6% del total de matriculaciones en 2004 frente a 25,9% en 1995). Además, los vehículos que emiten menos de 120 gramos por kilómetro alcanzaron un 7,7% del total.
En este sentido, las marcas japonesas se han situado en primera línea de salida. Dos de las tres marcas más limpias del mercado europeo, según el EcoTest de la Federación Internacional del Automóvil, son niponas: Toyota y Honda. Con su Príus, un híbrido que funciona con propulsores eléctricos alimentados por motores clásicos de combustible fósil, Toyota ha conseguido situarse como la marca más innovadora del mercado. Es el único motor de gasolina que consume menos que un diésel, 4,3 litros cada 100 kilómetros. Vendió cerca de 19.000 unidades en 2005 y prevé llegar a 25.000 en 2006. La siguiente marca limpia es Volvo, con su modelo V70 que se impulsa con gas natural.
Pese a todo, la mayor parte de las marcas europeas ya tienen compromisos medioambientales. Por ejemplo, todos los coches de diésel de Peugeot puede utilizar hasta un 30%. En Renault se han comprometido a que en 2008 un millón de los vehículos nuevos tengan unas emisiones de menos de 140 gramos por kilómetro. De estos, un tercio emitirán menos de 120 gramos por kilómetro. La francesa ya tiene un coche en Brasil que funciona casi al 100% con bioetanol.