Telecom Italia compra AOL en Alemania por 675 millones
El nuevo presidente de Telecom Italia, Guido Rossi, no se ha dejado influir por la tormenta política desatada en Italia tras la dimisión del ex responsable del grupo, Marco Tronchetti Provera, y quiere sentar las bases de lo que será su futura gestión. Como primer signo de la nueva etapa de continuidad, Telecom Italia anunció ayer la compra de AOL Alemania, filial de internet de alta velocidad de Time Warner, por 675 millones. La teleco se hace con 3,2 millones de clientes en Alemania, de los que dos millones son de banda ancha.
El nuevo presidente del grupo quiso dejar claro que seguirá adelante con los planes de segregación del negocio del móvil que planteó su predecesor -y que provocaron una sacudida política- pero que aún no hay nada decidido sobre su posible venta. 'Es sólo una escisión', dijo en declaraciones a Ansa recogidas por Bloomberg.
Poco antes, el diario La Stampa señalaba que el nuevo presidente del grupo tratará de vender la filial celular en Italia y Brasil por 40.000 millones de euros.
Según el nuevo presidente, la teleco se encuentra en una posición 'fuerte' y es un ejemplo de 'capitalismo moderno'. La Reppublica recogía además que Rossi -que fue responsable de la privatización de la teleco en 1997- dijo que había que alejar a la compañía del riesgo de 'renacionalización'. La empresa acumula una deuda de más de 40.000 millones de euros.
Por su parte, el primer ministro italiano, Romano Prodi, salió al paso de las críticas contra su Gobierno por las presiones ejercidas sobre Telecom Italia. 'Es absolutamente falso' que el Ejecutivo haya forzado la dimisión de Tronchetti, dijo un portavoz. Prodi, sin embargo, cedió a las demandas de la oposición y acordó que su Gobierno acuda al Parlamento al dar explicaciones sobre la disputa con Telecom Italia.
Según la prensa, Tronchetti Provera, quien renunció el viernes, explicó al regulador Consob que fue obligado a dimitir por las presiones del Gobierno ante su plan de reestructuración de la empresa, que incluía la segregación del negocio del móvil, sin descartar su venta.