S&P elige a Alba para el selecto grupo de líderes del futuro
Es el único valor español entre las 300 firmas de tamaño medio candidatas a ser 'blue chips'
En el argot del póquer, la ficha que tiene más valor se llama blue chip. Por asociación, el mundo de la Bolsa, muy aficionado a los apodos, ha definido como blue chip a las empresas más sólidas y con un mayor volumen de capitalización bursátil. Standard & Poor's acaba de publicar un informe en el que ha elegido a las 300 compañías de mediana capitalización con 'el mayor perfil de crecimiento, tanto intrínseco, como extrínseco, que las hace candidatas a desafiar a los grandes blue chip mundiales'. El rango de capitalización es entre 500 y 5.000 millones de dólares (entre 390 y 3.900 millones de euros). Sólo un valor español cumple con los requisitos de selección: Corporación Financiera Alba.
Cumplir con los criterios no es fácil: se precisan tres años consecutivos de revalorización bursátil, crecimiento de ventas, beneficios por acción y de aumento de la masa salarial.
Alba es el brazo inversor de la familia March y tiene un peso relevante en ACS (20,7% del capital), Acerinox (17,6% del capital) y Prosegur (5,2%). La compañía sube en el año un 14,3%, por encima del mercado. El valor acumula una revalorización del 155% desde 2002, que fue su último año negativo en Bolsa. Aún así, bancos como UBS creen que el valor tiene potencial suficiente para llegar a 51 euros, ayer cerró a 44,86.
Claro que ser incluido en la lista de las 300 es sólo el primer paso, el siguiente es ser incluido en el aún más exclusivo índice S&P Global Challengers 40; en el que, como su nombre indica, sólo figuran 40 compañías. Desafortunadamente, Alba no ha pasado el corte. Sólo cinco compañías europeas han entrado en la selección de este año: la francesa Etablissements Maurel et Prom; la alemana Freenet; la suiza Vontobel Holding y las británicas Collins Stewart y Sportingbet.
'Desde un punto de vista darwiniano, las compañías de mediana capitalización están verdaderamente bien posicionadas en una agradable trayectoria evolutiva, después de haber superado la costosa fase de puesta en marcha, ofreciendo al mismo tiempo estabilidad y oportunidades de rápido crecimiento en el futuro', explica S&P. La filosofía es 'identificar a las compañías que tienen el mayor potencial para convertirse en los líderes del futuro', completa la agencia.