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Unión Europea

Barroso pide ayuda a los 25 para la crisis de la inmigración

José Manuel Barroso asumió ayer por fin el liderazgo de la respuesta europea a la crisis humanitaria que viven las costas de España, Italia y Malta. El presidente de la Comisión Europea ha pedido por escrito a los 25 países de la Unión que redoblen los esfuerzos para resolver un problema 'que afecta a todos'.

Cinco meses después de que comenzara la riada de cayucos frente a las costas de Canarias, el presidente de la Comisión Europea ha decidido ponerse al frente de lo que ahora califica como 'un problema europeo'.

José Manuel Barroso se había mantenido hasta ahora prácticamente al margen de una de las crisis humanitarias más graves vividas en las costas europeas y había despachado con evidente displicencia las repetidas llamadas de socorro presentadas por las autoridades españolas.

La actitud del antiguo primer ministro portugués cambió ayer de manera radical, poco después de que la presidencia de la Unión Europea, que ocupa Finlandia durante este semestre, decidiera incluir la inmigración ilegal en la agenda del Consejo Europeo extraordinario que se celebrará en Lahti, a 100 kilómetros de Helsinki, el próximo mes de octubre.

Barroso se ha dirigido por escrito a los 25 primeros ministros que acudirá a esa cita para pedirles 'una respuesta urgente y poderosa por parte de toda la UE'.

Barroso ha creado un grupo especial de trabajo, dirigido por su vicepresidente Franco Frattini, para coordinar a todos los departamentos comunitarios relacionados con el problema de la inmigración.

El presidente de la CE adelanta ya tres propuestas que podrían impulsarse en Lahti 'para fortalecer la respuesta europea ante los desafíos en esta materia'.

Barroso propone, en concreto, que se aumente la capacidad de actuación de Frontex, la agencia europea de fronteras creada el año pasado y que ahora cuenta con poco más de una veintena de funcionarios.

La Comisión también quiere crear un sistema europeo de vigilancia de fronteras, así como una coordinación de las fuerzas que patrullen frente a las costas más conflictivas.

El presidente de la CE recuerda a los mandatarios europeos que 'la llegada masiva de inmigrantes a las costas de España, Italia y Malta, sobre todo, (...) podría ocurrir mañana en otros Estados miembros'.

Caldera defiende su gestión de la inmigración

El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, compareció ayer ante la Comisión de Trabajo y Asuntos Sociales para defender la gestión del Gobierno ante la avalancha de inmigrantes que han llegado en los cinco últimos meses a Canarias y a las costas andaluzas.Caldera dijo que los medios puestos en marcha para gestionar la crisis han permitido a España salvar 12.889 vidas este año, muy por encima de las 7.371 que se lograron salvar en 2004.El ministro de Trabajo alabó los beneficios de la inmigración, cifrados en las aportaciones que han hecho a la Seguridad Social desde 1999 (21.500 millones de euros) y en que las cotizaciones correspondientes a este año se aproximan a 8.000 millones de euros, un cantidad equivalente a las aportaciones realizadas al Fondo de Reserva de la Seguridad Social.

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