Bancos italianos: el final de los fantasmas
Corren aires nuevos en Italia. Este fin de semana, Banca Intensa y Sanpaolo IMI, los números dos y tres de la banca italiana, someten a sus consejos de administración 'sus diferentes hipótesis' de un proyecto de fusión. Una iniciativa apoyada por el jefe del Gobierno, Romano Prodi, que ve en ella la ocasión de crear, al lado de UniCredit, un segundo establecimiento financiero italiano de tamaño internacional.
Esta fusión no sería la primera: UniCredit es también el fruto del acercamiento de siete bancos en 1998-1999, y Banca Intesa, el de tres establecimientos en la misma época. Pero marcaría la puesta a nivel europeo de un sistema financiero italiano (...) hasta ahora muy fragmentado (...). La puesta a nivel empezó con la destitución, en diciembre, de Antonio Fazio, hasta entonces Gobernador vitalicio del Banco de Italia, y de la supresión de prerrogativas que le habían permitido (...) mantener a distancia a los bancos extranjeros (...).
La fusión entre Banca Intesa y Sanpaolo IMI debería significar un nuevo paso atrás para los demonios italianos y remataría la vuelta de la península en el concierto financiero europeo. La 'italianidad de los bancos', que tanto quería Antonio Fazio, será asegurada a partir de ahora por el sólo juego del mercado.