El precio de los coches sube más en España que en Europa
Comprar un coche en España no sólo no es cada vez más caro, sino que, además, se encarece más que en el resto de Europa. Los precios de los automóviles nuevos crecieron un 2% en el último año en España, frente al alza del 1,3% de media en Europa.
El precio de los automóviles en España, eso sí, sigue siendo inferior al que se registra en la mayor parte de países europeos, según los datos de la consultora Road to Data, que proporciona la información de referencia para el seguimiento de precios en el continente. Las tarifas son un 4% más baratas que en la Unión Europea.
Suiza es el país europeo donde cuesta menos comprarse un automóvil nuevo, ya que sale un 11% menos de media. El más caro, Dinamarca, donde este tipo de adquisición puede suponer un desembolso hasta un 91% superior al promedio continental. El precio de los automóviles, de hecho, ha crecido en todos los países europeos entre junio de 2005 y el mismo mes de 2006. Con dos excepciones: Italia y la República Checa, en los que el coste se ha desinflado un 1,4% y un 0,3%, respectivamente.
La escalada de precios en Europa, eso sí, se ha frenado considerablemente con respecto a los primeros tres meses del año, dado que en el primer cuarto del ejercicio el coste se incrementó un 2,9%. La tasa de alza, de hecho, es la menor de las que se ha registrado en los últimos dos años.
Los precios se han mantenido virtualmente estáticos en los países del centro de Europa, con un estancamiento en Polonia y Hungría.
Reglamento europeo
Los precios de los automóviles en Europa han cobrado especial relevancia, sobre todo después de que entrase en vigor un reglamento de la Comisión Europea en el que se regulaba la distribución de los automóviles y que opera en tres áreas: la distribución de automóviles nuevos, el sector de talleres y el mercado de los recambios.
Uno de los objetivos de este documento legal era armonizar los precios en los distintos países de la región. Algo que se está consiguiendo, según aseguró recientemente la Comisión Europea en un informe sobre los efectos de la nueva reglamentación, esta igualación se está logrando con un encarecimiento de abajo hacia arriba.
Los fabricantes europeos y la propia institución comunitaria, eso sí, aseguran que debido a las mejoras tecnológicas de los vehículos que no se repercuten en el precio real, el alza de la inflación y la 'alta competitividad' del mercado, que obliga a continuas ofertas y descuentos, hacen que la institución comunitaria afirme que los 'precios reales' de los coches muestran una 'tendencia a la baja'. El segmento que más se ha encarecido en el último año en el mercado español es el de los vehículos pequeños (como el Opel Corsa, el Volkswagen Polo o el Peugeot 207), cuyo precio ha experimentado un alza del 3,6%, seguido del segmento medio-alto (Audi A3, BMW Serie 1), que ha sufrido un encarecimiento del 1,9%. Los coches para ejecutivos compactos (como el Serie 3 de BMW), han subido el 1,7%.
Los motores de gasolina continúan en retroceso en el continente y ya sólo suponen el 21% de las matriculaciones totales. Este mayor ritmo de ventas se ha traducido en un incremento superior de precios. De esta manera, los coches diésel se han encarecido el 1,5% en el último año, frente al 1% de los coches que funcionan con gasolina.
La seguridad, cada vez más importante, según Faconauto
La cultura de la seguridad frente al volante que propugna la Dirección General de Tráfico (DGT) tiene su reflejo en el equipamiento de serie de los vehículos en la actualidad, ya que casi la totalidad de ellos incorporan elementos de seguridad como frenos ABS, dirección asistida o airbags, según recoge un estudio realizado por la consultora MSI para la federación de concesionarios (Faconauto).La organización prevé que en los próximos años 'ganarán protagonismo' equipamientos novedosos en la actualidad, como el sistema de asistencia de aparcamiento o el programa electrónico de estabilidad (ESP), que según la Federación, 'estará presente en todos los vehículos en el plazo de cinco años'.