Hipotecas transfronterizas
La integración de los mercados hipotecarios en la Unión Europea sigue siendo más un deseo que una realidad cercana. Un informe que acaba de publicar la Federación Hipotecaria Europea pone de manifiesto las lagunas en la gama de productos que existen en distintos mercados de la zona, insuficiencias que podrían subsanarse con una mayor integración, según sugieren los redactores del informe.
Los expertos creen que la desaparición de las barreras en el ámbito del crédito hipotecario generaría un mercado más flexible y con las ventajas derivadas de una oferta mucho más amplia de la que proporcionan los mercados financieros nacionales, además de un aumento de la competitividad entre las entidades. 'El acceso a productos con distintos vencimientos y mecanismos de variabilidad del tipo de interés permitiría a los consumidores ajustar mejor sus preferencias de riesgo a sus necesidades de planificación financiera', señala el informe.
Sin embargo, las diferencias legislativas en materia de derecho hipotecario entre los distintos estados miembros y la concurrencia de normas jurídicas de distinta naturaleza constituye una rémora a ese proceso de integración. Aspectos como la diferente reglamentación de la amortización anticipada, el tipo de método de financiación o los topes superiores o inferiores en los tipos de interés determinan todavía grandes diferencias de productos por países.
En líneas generales, las características de los créditos hipotecarios definen dos grupos de países: los de tipo fijo, en los que se incluyen Bélgica, Dinamarca, Alemania, Francia, Hungría, los Países Bajos y Suecia; y los de tipo variable, donde se incluye Grecia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Portugal, Reino Unido y España. Aunque no es la única, esta es la distinción más relevante al analizar la posible influencia de la política monetaria. Lógicamente, una subida de los tipos de interés tiene más repercusión en países, como España, donde predominan los variables.
Una de las razones que apunta la Federación Hipotecaria Europea para explicar esta predominio de los variables, pese a estar más expuestos a las subidas de los tipos, es la protección de la que goza el consumidor para amortizar su préstamo a bajo coste en cualquier momento. Como el prestatario puede transferir el préstamo a cualquier otra entidad que ofrezca mejores condiciones o renegociarlo cuando bajan los tipos de interés, mientras que la entidad no puede hacerlo si suben los tipos, éstas no tienen aliciente para ofrecer tipos fijos y en la práctica la oferta se limita a variables.
En un momento de subida de tipos parece lógico, por tanto, que surjan nuevos comentarios sobre las bondades de una integración del mercado hipotecario europeo.