Egoísmos en la OMC

La gran negociación de la OMC agoniza en medio de la indiferencia generalizada (...). Falta voluntad política por parte de los mayores actores. En este gran mercadeo que afecta a más de 140 países, cada participante dispone de un voto pero algunos (...) pesan más que otros: el de los países desarrollados y de los países emergentes. Una docena de actores sin los cuales no hay posibilidad de acuerdo. Una docena de egoísmos nacionales también (...).

La ironía es que el ciclo (...) iniciado hace cinco años en Doha debía ser el del desarrollo. Se trataba de que las naciones más pobres tuvieran acceso a los beneficios de la liberalización del comercio. Concretamente, que sus productos esencialmente agrícolas tuvieran acceso a los mercados (...). Los intereses de las naciones siguen siendo (...) lo más importante (...). Y la proximidad de algunas citas electorales hace aún más improbable un acuerdo generoso. ¿Quién imagina al presidente Bush descontentar a sus productores de soja o de algodón unos meses antes de las elecciones al Congreso (...)? La firmeza francesa (...) sobre el tema agrícola no se puede desligar de las elecciones presidenciales del año que viene (...). Los países pobres ya saben que pueden contar con la generosidad de los países ricos siempre y cuando no les cueste nada o muy poco.