Bancos y cajas se comprometen con una política más verde
Afinales de 2002, diez instituciones financieras crearon una serie de normas con las que asegurar que los proyectos que financiaban no tuvieran un impacto negativo en el medio ambiente. Nacieron así los Principios de Ecuador, a los que se han adherido ya 40 entidades de todo el mundo, incluidas dos españolas: el BBVA y Caja Navarra.
Este mes, las instituciones firmantes han endurecido las disposiciones acordadas. De momento 33 bancos, entre ellos el presidido por Francisco González, han ratificado esta revisión. La norma se aplicará a proyectos que demanden un coste de capital de 10 millones de dólares. Anteriormente, este umbral era más elevado, 50 millones.
Los Principios de Ecuador obligan, entre otras cosas, a incluir en las due diligences o informes financieros, un estudio de impacto medioambiental y social de los proyectos a financiar. Los estándares de estos documentos vienen marcados por la Corporación Financiera Internacional (IFC, en inglés), una agencia del Banco Mundial que apoya al sector privado. Estos trabajos se aplicarán a partir de ahora también a las actividades de asesoría financiera y expansiones de proyectos existentes en los que los impactos ambientales o sociales adicionales sean importantes.
BBVA y la CAN son las únicas dos entidades españolas que han suscrito este acuerdo sectorial
Los bancos signatarios, entre los que figuran firmas como Citigroup, Barclays o ING, también se han comprometido a incluir en sus exámenes los estándares laborales del proyecto que financien y a hacer público el progreso de la aplicación de los Principios anualmente.
Las condiciones se han endurecido porque también se hicieron más estrictos, en febrero, los parámetros del IFC. Además, en los tres años en los que han estado en vigor, ONG y algunos clientes han sometido a consideración de los signatarios una serie de comentarios para su mejora.
Los bancos que se han adherido a estos Principios han visto en el medio ambiente no sólo un compromiso, sino también un negocio. Juntos proveen el 85% de la financiación de los proyectos en marcha en el mundo, según el también firmante ABN Amro.
Para las entidades financieras que se han comprometido con estos estándares, y entre las que figuran algunos de los bancos más relevantes del mundo, el compromiso con el entorno no es una aspiración que constriñe su competitividad en el mercado. Los signatarios descartan que el negocio crediticio haya caído por esta causa en los últimos tres años y algunos, incluso, afirman que los requisitos de los Principios de Ecuador han sido bastante positivos.
Para Tomás Conde, director de gestión e información de sostenibilidad de BBVA, 'los acuerdos nos benefician porque los promotores de los proyectos prefieren evitar problemas y no acuden a bancos con malas políticas de riesgos medioambientales'.
La importancia de mantener la reputación
Los bancos que han suscrito los Principios de Ecuador no desean duplicar las exigencias laborales y medioambientales que fijan las leyes de los países donde operan. 'Se exige un estudio de impacto empezando siempre por la norma local y, si esta es poco exigente, entonces se aplican los requisitos del Banco Mundial', explica Tomás Conde, responsable de sostenibilidad de BBVA. Los proyectos susceptibles de ser financiados pueden caer en tres categorías: aquellos que tienen un impacto irreversible, los que comportan consecuencias graves pero reversibles y los que no causan incidencia alguna sobre el entorno.