Realia compra la sede de Lafarge en París por 150 millones
Realia refuerza su patrimonio antes de salir a Bolsa. La inmobiliaria que comparten FCC y Caja Madrid ha comprado en París el edificio que sirve de sede a la cementera Lafarge por 150 millones de euros. En otoño se estrenará en el parqué, pero antes los dos primeros accionistas crearán un holding en el que han sellado su permanencia durante cinco años prorrogables.
Convertir a Realia en empresa cotizada requería darle más tamaño. Y así lo han hecho los dos principales accionistas, FCC y Caja Madrid, que ahora controlan el 49,17% en la inmobiliaria cada uno. Tras adquirir el 73% de la sociedad de inversión inmobiliaria Siic de París y lanzar una oferta para llegar al 100%, la inmobiliaria acaba de cerrar la compra de un emblemático edificio en la capital francesa por 150 millones, según revelaron a Cinco Días fuentes de la empresa.
El inmueble, en el renombrado distrito 16 que rodea a la plaza de Víctor Hugo, alberga la sede social Lafarge, el primer fabricante mundial de materiales de construcción. El edificio, de 10.000 metros cuadrados situado en la calle Belles-Feuilles, seguirá teniendo como inquilino al gigante francés, que ya tenía un contrato por nueve años.
La operación, la segunda de Realia en Francia en dos meses después del desembarco en Siic de París en mayo, le permite elevar el peso del negocio patrimonial por el que va a apostar. El singular edificio se incluirá en la filial recién adquirida. Aunque primero debe finalizar la opa que obligaba a lanzar la ley francesa para controlar el 100% de la división. La intención es que siga cotizando en Bolsa. Este tipo de sociedades de inversión inmobiliaria cotizadas disfrutan de ventajas fiscales inexistentes en España, lo que ha animado a otras inmobiliarias y constructoras como Metrovacesa o Sacyr Vallehermoso a protagonizar compras en los últimos meses.
Un consejero más
De momento, no hay más adquisiciones en el horizonte de Realia antes de su salida a Bolsa en otoño, a no ser que haya una 'oportunidad muy clara y rentable', según fuentes de la compañía.
Previamente al estreno bursátil, FCC y Caja Madrid crearán una sociedad que englobará su participación en Realia. Pondrán en el mercado en torno a un 40% de la inmobiliaria, con lo que el holding englobará aproximadamente el 60%. La constructora controlada por Esther Koplowitz tendrá algo más del 50% en ese holding, mientras la segunda caja española poseerá el 49%.
Así ha quedado plasmado en el pacto de accionistas que acordaron ya en marzo, confirman fuentes de ambas partes. De esta forma, tanto el grupo de construcción y servicios como la caja obtendrán plusvalías de una compañía que hoy tiene un valor contable de unos 220 millones de euros y en Bolsa valdrá más de 2.000 millones.
El acuerdo entre ambos socios incluye un compromiso de permanencia en el holding patrimonial de cinco años, prorrogables luego cada dos. Esto da una 'gran estabilidad' al accionariado de la inmobiliaria, apuntan fuentes de la empresa. El pacto también incluye tomar las decisiones estratégicas de la compañía con mayoría reforzada, lo que exigirá el apoyo de Caja Madrid.
Quedan fuera del holding propietario de Realia El Corte Inglés, con un 1,3%, y Iberpistas (de Abertis), con un 0,4%, que pueden decidir vender su participación y lograr ganancias extra en la oferta pública de venta de acciones (OPV) de otoño.
El objetivo principal de que cambie la igualdad en la participación que tienen FCC y Caja Madrid es que la tercera constructora española pueda consolidar en sus cuentas los resultados de Realia, algo que hasta ahora no podía hacer.
Para ello, además de tener más del 50% del capital que no esté en Bolsa, debe cumplir otro requisito: tener un vocal más en el consejo de la inmobiliaria. Ahora cuenta con cinco, igual que Caja Madrid, sin contar al presidente, Ignacio Bayón, y al director general, Íñigo Aldaz, que también son miembros del consejo.
Asimismo, tendrá otro puesto en la comisión ejecutiva que ahora forman ocho consejeros, de los que tres son representantes de FCC y tres de Caja Madrid. Pese a estos cambios, no se prevén modificaciones en la gestión ni en el mando ejecutivo de la inmobiliaria con Bayón y Aldaz como presidente y director general.
Sí habrá variaciones en el plan de negocio. Realia reforzará el área de patrimonio inmobiliario en la que los ingresos proceden del alquiler de los edificios frente a la actividad con mayor peso ahora, la promoción inmobiliaria. La idea es que ambas pesen un 50% en las ventas, con el fin de que la ralentización que el sector espera en la venta de pisos tenga un menor impacto.
La inmobiliaria analizó comprar Parquesol
En su plan de compras, Realia incluyó a la inmobiliaria Parquesol. La compañía que controlan FCC y Caja Madrid negociaron con la empresa propiedad de la familia vallisoletana Fernández Fermoselle, según diversas fuentes de la empresa. Pero las conversaciones no fructificaron y los herederos del fundador de esta inmobiliaria, Marcos Fernández Fernández, optaron por sacarla a Bolsa. Aunque el estreno no fue demasiado halagüeño. Desestimada esta adquisición, Realia ha seguido analizando operaciones que sí han llegado a buen puerto, como la compra de Siic de París. Era una oportunidad de crecer en el mercado inmobiliario francés que la participada de FCC y Caja Madrid ha seguido aprovechando. El siguiente fruto ha sido la adquisición que acaba de cerrar del edificio que sirve de sede a Lafarge, competidora de la filial de la constructora, Portland Valderrivas, en España y en Estados Unidos. Francia tendrá un peso sustancial en el negocio de Realia.