1,5 millones para un despacho a la última
Cremades concluye el proyecto de oficina digital
El bufete madrileño de abogados Cremades y Calvo-Sotelo ha cambiado de domicilio para convertirse en 'la primera oficina digital de Europa operativa en una empresa real', según Javier Cremades, socio director del despacho. Sus nuevas dependencias, en el número 30 de la calle Jorge Juan, destilan tecnología por todos los rincones después de una inversión de 1,5 millones de euros que se suma al precio de adquisición del inmueble.
El abogado ha involucrado en el traslado a una docena de firmas tecnológicas que han tomado a Cremades y Calvo Sotelo como escaparate para mostrar sus últimas tecnologías. Entre ellas figuran compañías como HP, France Télécom, Amena, Microsoft, Nec, Philips, Nextel o Alcatel, cuyas participaciones persiguen consensuar el concepto de oficina digital y transmitirlo al empresariado español.
El objetivo de aunar arquitectura, telecomunicaciones, informática y los más avanzados sistemas de iluminación y climatización, ha sido mejorar los procesos de trabajo, potenciar la comunicación y la creatividad de los empleados, además de ahorrar costes gracias a una mejor gestión de los recursos. 'Todos deberíamos aspirar a tener una oficina digital, es una simple cuestión de competitividad', afirmó durante la presentación Javier Cremades.
Como banco de pruebas se ha elegido un despacho con 51 profesionales a quienes les cambia el modo de trabajar. El acceso a internet desde cualquier punto, la integración de comunicaciones fijas y móviles a través de redes IP, sistemas de iluminación que se adaptan a cada necesidad, climatizadores que ahorran hasta un 50% de energía, y un largo etcétera, ya figuran entre las aplicaciones a su alcance.
El modelo de empresa podrá ser visitado a partir del mes de octubre por las entidades interesadas en ponerse al día. Hasta entonces la experiencia se expone en www.laoficinadigital.com.
Termómetro digital
La consultora inmobiliaria Aguirre Newman será quien mida el incremento de productividad de Cremades tras digitalizar sus oficinas. Su método establece indicadores de rendimiento y tratará de encontrar los puntos débiles, incluyendo ratios tan dispares como el gasto en electricidad, consumo telefónico, coste por puesto, bajas laborales, etcétera.