Perfil conservador. Defensivos para amortiguar el golpe
Prácticamente ninguno de los fondos de inversión domiciliados en España logró salvarse de las pérdidas en el reciente bache de los mercados. Encontrar la medicina perfecta para evitar las pérdidas en las inversiones resulta casi imposible.
Sin embargo, frente a pérdidas que en algunos casos llegaron a superar el 20% entre máximos y mínimos del mes de mayo, los fondos de perfil más conservador se han movido cerca del equilibrio o en todo caso con suaves pérdidas. Eso sí, en el conjunto del año mantienen ganancias, aunque rara vez lleguen al 1%. Es decir, se trata de fondos con muy pocas posibilidades de vencer a la inflación, aunque en momentos de crisis sirvan para que los inversores se cubran aceptablemente. Más del 60% del dinero que gestionan los fondos españoles se encuentra en estos fondos.
¿Está justificada tanta prevención y tanto miedo al riesgo? Los expertos aseguran que los últimos indicios macroeconómicos han incrementado el riesgo en los mercados y, por lo tanto, los inversores con especial sensibilidad a las pérdidas podrían tener justificada una reacción defensiva. Los fondos de renta fija a corto plazo y los fondos de dinero, además de los garantizados y los denominados fondos de retorno absoluto (es decir, aquellos que se gestionan sin seguir tendencias de los mercados) son los que están mejor preparados para responder a estas necesidades.
'El riesgo actual no es remoto. Es muy real. Y puede ser un primer aviso de una corrección más acusada', afirma Avelino Hernández, Director de Inversiones de Sabadell Banca Privada. 'Nosotros estamos dando a los inversores consejos de cautela. Hay un riesgo real de que los bancos centrales aceleren las subidas de tipos de interés ya que los niveles de tipos de interés son todavía estimulantes y nada restrictivos. Hay un riesgo real de que las políticas monetarias, obligadas a cortar las expectativas inflacionistas al alza, se convierten en más agresivas por lo que el riesgo de recorte de la liquidez es ahora mismo bastante elevado. Y ello afectaría a las Bolsas, frenaría el crecimiento económico y afectaría sobre todo a los países emergentes. Lo que creemos no es que esto vaya a suceder con seguridad. Pero sí que hay una probabilidad bastante alta de que suceda', agrega. La respuesta a un panorama tan sombrío es clara: 'Recomendamos infraponderar las inversiones en Bolsa, al menos de cara a los próximos dos o tres meses. Además tenemos otro factor estacional, la proximidad del verano, que siempre presenta motivos para desplazamientos de dinero y que acaba traduciéndose en un aumento de las volatilidades y, por lo tanto, del riesgo. Hasta la vuelta del verano yo recomendaría prudencia y cautela a los inversores, sobre todo a aquellos que tienen un perfil más tranquilo y menor grado de tolerancia al riesgo', agrega Avelino Hernández. 'Por resumir, reduciría Bolsa más que bonos a plazo largo. No veo problemas en la renta fija, ni siquiera en la de medio y largo plazo. Y creo que puede haber problemas en otro tipo de mercados, como los emergentes, que ya llevan una temporada subiendo'.
José Ramón Iturriaga, gestor del fondo Okawango, de Abante Asesores, un fondo de rentabilidad absoluta, es uno de los que han afrontado mejor la reciente crisis de estas últimas semanas y, aunque no se ha librado de las pérdidas que han afectado a todos los fondos, incluidos los de gestión alternativa, presenta en el conjunto del año una ganancia superior al 6% y en el mes de mayo una ligera subida.
'El golpe que han encajado los mercados es de tipo estructural y no estamos únicamente ante una reacción por exceso de compras, como en otras fases bajistas, que se iniciaron tras una etapa larga de subidas. Ahora, hasta que no se aclaran las incógnitas de tipo macroeconómico, típicas de una etapa de final de ciclo económico, en las que la inflación y el crecimiento son dos elementos a tener muy en cuenta, asistiremos a un repunte de volatilidades en todos los mercados. Creo que estamos más bien ante un cambio de tendencia, aunque desde luego no tenga nada que ver con lo sucedido en el año 2000 ya que ahora nos encontramos con valoraciones muy atractivas en los mercados bursátiles, en especial en algunos sectores. Y los grandes valores no están caros. El PER (veces que la cotización supera al beneficio por acción) está ahora bastante razonable en muchas compañías'.
'No cabe duda de que la caída de este mes ha dejado huella. Existe un riesgo real de subidas de los tipos de interés. Y los tipos de interés altos son malos para las Bolsas', señala Ofelia Marín, jefe de Análisis de Banca March. 'En Europa, los tipos cortos y los largos están bajos y el riesgo de que suban está ahí'.
'Un factor que hay que vigilar bastante de cerca es la evolución del dólar', afirma, ya que hay mucha inestabilidad en los mercados de cambios por lo que pueda suceder si la corrección del déficit exterior de Estados Unidos se afronta de forma rápida. 'Hay inversores que estimaron que había un riesgo real de caída del dólar y en estos momentos todos nos preguntamos si la divisa norteamericana va a bajar más. Hay que tener en cuenta que los tipos de interés en Estados Unidos están altos y que el dólar es una moneda refugio, sobre todo para los inversores asiáticos'.