La SEPI y los sindicatos negocian una nueva tanda de prejubilaciones en Izar
La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y los sindicatos siguen negociando los términos finales de lo que será la adjudicación de los cuatro centros que todavía permanecen en Izar, incluidas las garantías laborales y sociales de los trabajadores, tras una nueva tanda de prejubilaciones.
La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y los representantes de los sindicatos UGT y CC OO siguen con su ritmo semanal de negociaciones para ultimar los detalles de la adjudicación de los cuatro centros que se mantienen integrados en el grupo público de construcción naval Izar: los astilleros de Gijón, Sestao (Vizcaya) y Sevilla, y la fábrica de motores de Manises.
Entre los asuntos que ocupan las últimas reuniones se encuentran las garantías de tipo laboral y social que tendrá que ofrecer la SEPI a los trabajadores de los astilleros, como sucede en cualquier proceso de enajenación tutelado por el holding público.
En este ámbito, la Sociedad y los sindicatos mantienen una discusión intensa sobre las condiciones de un nuevo Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que habrá que aplicar a las cuatro factorías, dado que las ofertas de todos los candidatos a hacerse con las plantas exigen que la SEPI sanee las plantillas como condición para hacerse cargo de los astilleros, explicaron en fuentes conocedoras del proceso.
Las condiciones del ERE deberían ser las mismas aplicadas para el recorte de empleo de 2005
Esta regulación de empleo, que se solventaría mediante prejubilaciones, se sumará a la que ya se llevó a cabo el año pasado en el propio proceso de reconversión de los astilleros públicos y que supuso un recorte de plantilla del 38% (3.983 prejubilaciones de mayores de 52 años).
Puesto que la medida parece inevitable, los sindicatos quieren que las condiciones del nuevo ERE sean las mismas que de las del proceso llevado a cabo en 2005. Es decir, que los trabajadores que se prejubilen perciban una garantía económica por parte de Izar equivalente al 76% del salario regulador, más prestaciones por desempleo y ayudas equivalentes a la jubilación ordinaria del sistema de la Seguridad Social a partir de los 60 años y hasta la jubilación a los 65 años. Asimismo, los trienios o quinquenios se continuarían abonando hasta cumplir los 58 años y se mantendrían los seguros de vida existentes.
Garantía de la SEPI
Además, en el caso del anterior ERE, se acordó que Izar se mantuviera activa para gestionar las prejubilaciones durante los próximos 12 años, completando en varios pagos el coste del ajuste laboral, que entonces ascendió a 1.225 millones de euros.
Los sindicatos también han exigido a la SEPI garantías para los trabajadores que se quedaran en los centros tras la adjudicación. En este caso, reclaman que se asegure el empleo a las plantillas durante siete u ocho años, un periodo más prolongado del habitual. En el supuesto de que el proyecto de los adjudicatarios fracasara en ese plazo, los trabajadores se podrían reintegrar en el sector público (Navantia, por ejemplo).
En todo caso, las negociaciones siguen abiertas. Ayer mismo, los responsables federales de UGT y CC OO trasladaron en sendas reuniones el estado de las conversaciones a los respectivos responsables sindicales de cada centro, para que éstos puedan hacer lo propio a los trabajadores en cada factoría, y definieron las líneas de actuación en caso de que no se consigan unas garantías mínimas.
Los candidatos del asesor
Boston Consulting, asesor independiente de la SEPI en el proceso de adjudicación de Izar, ya ha elaborado su informe técnico con los candidatos que, a su juicio, deberían hacerse con los astilleros en venta, confirmaron en fuentes conocedoras del documento.El asesor recomienda que el centro de Gijón sea para la viguesa Vulcano, el de Sestao para Construcciones Navales del Norte, el de Sevilla para la oferta de Astilleros de Huelva-Boluda y Manises para Ros Casares.La decisión final, sin embargo, no está tomada y corresponde a la comisión de liquidación, que no se reunirá hasta que haya un mínimo acuerdo con los sindicatos. De momento, la SEPI y las centrales siguen discutiendo la estructura que deberá tener el holding que, previsiblemente, unirá los centros tras la adjudicación, con la posible presencia de una sociedad de capital riesgo del Instituto de Crédito Oficial y de cajas de ahorros.