Airbus eleva su tributación en España tras un pacto entre los accionistas
Airbus tributa en España por un porcentaje de sus beneficios superior a la participación que la SEPI tiene en el fabricante europeo, a través de EADS. Esta ventaja para España se consigue como resultado de la aplicación de un pacto entre los propietarios por el que los beneficios asignados a cada país en el que Airbus tiene presencia no se fijan en función de su participación de capital, sino de su carga de trabajo.
Los propietarios de Airbus han renovado un pacto en el que se establece que la tributación por los beneficios que afloran en cada uno de los países en los que el fabricante europeo de aviación civil tiene una fuerte presencia institucional e industrial (Alemania, Francia, España y Reino Unido) no se realice por criterios de conveniencia contable, en función de las ventajas que les pueda otorgar la legislación tributaria local, sino según unos principios transparentes consensuados entre las partes.
El pacto alcanzado fija que la asignación del beneficio a cada país se establecerá en función de la carga de trabajo que las fábricas de Airbus instaladas en dichos Estados consiguen en cada uno de los proyectos de la fabricación de las aeronaves de la empresa. Los dueños de Airbus desecharon una propuesta para que tal reparto se fijara en función de la participación accionarial, directa o indirecta a través de EADS, que tienen las sociedades propietarias de cada país.
El acuerdo, conocido por las siglas APA, fue suscrito por primera vez en el año 2000, tras la conversión del antiguo Consorcio Airbus en una empresa mercantil. Los dueños establecieron entonces que los porcentajes asignados a cada país se acordaran por períodos de tres años. Hasta la fecha se han realizado dos revisiones del acuerdo y en ambas la sociedad Airbus España ha elevado su porcentaje de tributación nacional, ya que la carga de trabajo de las industrias españolas no ha hecho más que crecer en los últimos años.
España empezó con una carga de trabajo del 4% y ha subido al 10%
El capital de Airbus está integrado por EADS, con una participación del 80%, y por British Aerospace, con el restante 20% (que hace pocas semanas ha mostrado su intención de vender). Las acciones de EADS, por su parte, están repartidas en cuatro paquetes principales. Los dos primeros, del 29,9% cada uno, están en manos de empresas públicas y privadas alemanas y francesas, respectivamente. El tercero, del 5,5%, lo tiene el holding estatal español SEPI. El resto cotiza en Bolsa.
La participación en la carga de trabajo de las fábricas españolas de Airbus ha evolucionado positivamente a lo largo del tiempo. En la década de los ochenta del pasado siglo oscilaba en torno al 4%. Con el lanzamiento del programa del avión A-320 se pudo elevar al 5,5%. A mediados de la década de los noventa la fabricación de los aparatos de la familia A-330 y A-340 permitió elevar la carga de trabajo al 7%. Con el súper avión Airbus 380, que entrará en servicio a final de año, el sector aeronáutico español ha conseguido un récord sin precedentes al contar con una carga de trabajo del 10%.
Airbus no hace públicos sus resultados. La propietaria del 80% de sus acciones, EADS, informó de unos ingresos de 34.206 millones y unos beneficios netos de 1.769 durante el pasado ejercicio de 2005.
El acuerdo alcanzado por los socios de Airbus se pone como ejemplo de buena práctica por el Ministerio de Economía y Hacienda en su cruzada por dar transparencia a la tributación de los grupos transnacionales que operan en España. Estas multinacionales tienen capacidad, a través de la fijación de los precios internos entre filiales, de trasladar las bases imponibles sobre las que se aplica el impuesto hacia aquellos países en los que operan y donde la tributación es más favorable.
El departamento que dirige Pedro Solbes ha incluido la lucha contra este tipo de prácticas dentro de la nueva Ley de Prevención del Fraude Fiscal. En todo caso, el control de las mismas es bastante complicado, y se ve facilitado de forma decisiva si existen convenios bilaterales con las administraciones fiscales de otros países donde las empresas tengan presencia, especialmente si se trata de la matriz del grupo.