Del espacio a la mesilla de noche datos técnicos
El 70% de los 374 astronautas que han viajado en misiones de la NASA necesitaba gafas. æpermil;ste no es un asunto baladí, ya que la falta de gravedad en el espacio aumenta la presión ocular de forma considerable, la radiación solar es un 30% más fuerte que en la tierra por la ausencia de la atmósfera y los astronautas tienen que enfrentarse a momentos críticos como el aterrizaje o las reparaciones de la nave, donde unas buenas gafas son imprescindibles.
Estos datos, avanzados por Keith Manuel, jefe de oftalmología de la NASA, sirvieron como punto de partida para la presentación mundial de Titan Minimal Art, la nueva colección de gafas del fabricante austriaco Silhouette, celebrada la pasada semana en Milán en el transcurso de la feria internacional de óptica MIDO.
El fabricante, que lleva seis años equipando a los astronautas de la NASA con estas gafas, ha dado un paso más allá y ha sacado una serie de ocho gafas, con las mismas características técnicas y un peso de 1,8 gramos (las lentes), 'las más ligeras del mundo', a un precio de 250 euros. Para corroborar estas impresiones, Silhouette invitó al astronauta norteamericano James D. Wetherbee, piloto de la NASA con 1.600 horas de vuelo en el espacio, que mostró en varios vídeos la necesidad de contar con unas gafas flexibles, que no se despeguen de la cara en ninguna circunstancia, a pesar de realizar movimientos bruscos, y que ofrezca garantías suficientes para no sufrir daños en la vista. 'En el espacio se producen cambios trascendentales en la dinámica de fluidos de los cuerpos. En general se produce una gran retención de líquidos y eso implica importantes perturbaciones en los sentidos y sobre todo en la vista. En las primeras 72 horas la presión ocular puede estar entre un 50% y un 100% por encima de lo que suele ser normal, por lo que ser capaz de enfocar bien es vital'.
Tassilo Gruber, director de ventas internacionales de la compañía, que vende 2,2 millones de gafas de la marca Silhouette al año (también comercializa las de las marcas Adidas y Svarovski) y obtuvo una facturación de 205 millones de euros en 2005, aseguró que tienen grandes esperanzas en la comercialización de estas gafas, 'de las que esperan vender 500.000 unidades a lo largo de este año y duplicar esa cifra para 2007'.
De esta cantidad, el 55% de las ventas se destinarán al mercado europeo, el 35% a Estados Unidos y el 10% restante a Asia. Preguntado por si se siente preocupado por el fenómeno de las copias masivas de gafas en China, Gruber fue claro: 'No todo el valor de las gafas está en el precio. El de Silhouette está formado por diseño, innovación y tecnología para vender las gafas más avanzadas'.