Hacienda compensará a las empresas por los ajustes contables tras la reforma fiscal
El Ministerio de Economía y Hacienda está buscando fórmulas para que las empresas no se vean perjudicadas 'paradójicamente' por la próxima rebaja prevista en el impuesto de sociedades (reducción del tipo de gravamen del 35% al 30% de forma gradual en los próximos cinco años), según informaron a Cinco Días fuentes de la Administración.
José Ramón González, presidente del Instituto de Contabilidad Auditoría de Cuentas (ICAC), organismo dependiente de Economía, reconoció también ayer que el ministerio ha formado un grupo de expertos (junto al Banco de España) para estudiar el impacto que tendrá la reforma fiscal y contable sobre las cuentas de las empresas. Las nuevas normas contables (en concreto la NIC-12) exigen a las sociedades que adapten sus cuentas ya en el mismo año en que se produzcan cambios tributarios. Aunque la reforma del impuesto de sociedades está prevista que entre en vigor en 2007, su aprobación se hará efectiva en el Parlamento ya este año (en torno al verano).
Cientos de millones
Este desajuste obliga a las empresas a adaptar ya en 2006 sus cuentas, entre ellas, la que mantienen por 'devolución de impuestos o impuestos diferidos' (una previsión de lo que estiman que Hacienda les devolverá aplicando las deducciones fiscales). El hecho de que el año que viene el tipo general del impuesto pase del 35% al 34%, provocará ya en 2006 un ajuste contable por adelantado que, en la practica supondrá un disminución del activo (la devolución de impuestos prevista será menor porque deberá calcularse con un tipo de gravamen menor, que es el 34%).
Aunque, en principio, este desajuste sólo es contable (al final las empresas gozarán de una rebaja real de impuestos), lo cierto es que obligará a reducir sus resultados en 2006 en una cantidad 'muy apreciable', según admiten fuentes del sector financiero consultadas por este diario. Calculan 'en cientos de millones de euros' si se suman los desajustes de todas las empresas afectadas (las grandes sociedades que cuentan con cantidades elevadas en la cuenta de 'impuestos diferidos o anticipados').
La intención de Hacienda es llegar a una solución en los próximos dos meses, periodo en el que la reforma del IRPF y del impuesto de sociedades estará en trámite parlamentario, por si se pudiera solucionar vía enmienda a los textos normativos.