Los informes de gestión cobran protagonismo en la memoria
Un nuevo paso en la transparencia. El informe de gestión que acompaña a la memoria, el balance y la cuenta de resultados, y que hasta ahora se trataba de un documento de compromiso que muchas grandes empresas liquidaban en media página, debe contener a partir de ahora y por imperativo legal nuevas informaciones que le otorgan un mayor protagonismo.
La fama de inutilidad del informe de gestión no es nueva. El ex presidente de la CNMV, Blas Calzada, que participó en una conferencia hace unas semanas, ponía el ejemplo del informe de gestión como una de esas cuestiones que las empresas se limitan a rellenar 'pero donde nunca se dice nada'. Se trata de una opinión ampliamente compartida por expertos en derecho corporativo y sobre todo por los inversores que no encontraban ninguna utilidad en su lectura. El socio de PricewaterhouseCoopers (PwC), Antonio Vázquez, asegura que 'tradicionalmente era una página al final de la memoria a la que poca gente hacía mucho caso. Cuando las compañías querían dar información de verdad, lo hacían a través de otros métodos, como presentaciones u otros documentos'.
Pero precisamente la medida legal que, desde este año, exige a las empresas ofrecer mayor información en el informe de gestión tiene por objetivo evitar que se difundan informaciones que sólo lleguen a un tipo de público. Las que aparezcan en el informe de gestión estarán a disposición de todos los interesados. 'Se busca que el inversor tenga información suficiente sobre la visión que la compañía tiene internamente de sí misma. Es decir, la norma trata de que el inversor tenga la posibilidad de ver la empresa a través de los ojos del gestor', explica el socio de PwC.
La culpable de que los informes de gestión de este año sean más voluminosos y contengan un mayor número de datos es la Ley de Acompañamiento de 2003, que modificó la Ley de Sociedades Anónimas para establecer a partir del ejercicio 2005 y, por tanto para la documentación legal que se publique a partir de este año, la obligación de introducir más datos en el informe.
De acuerdo con la ley, éste 'deberá contener una exposición fiel sobre la evolución de los negocios y la situación de la sociedad, junto con una descripción de los principales riesgos e incertidumbres a los que se enfrenta'. La norma añade que la exposición deberá consistir 'en un análisis equilibrado y exhaustivo de la evolución de los resultados de los negocios y la situación de la sociedad, teniendo en cuenta la magnitud y complejidad de la misma'. El texto legal añade que en la medida necesaria para la comprensión, los resultados o la situación de la sociedad, 'este análisis incluirá tanto indicadores clave de los resultados financieros como, cuando proceda, no financieros, que sean pertinentes respecto a la actividad empresarial concreta, incluida información sobre cuestiones relativas al medio ambiente y al personal'.
El socio de PwC, Antonio Vázquez, confía en que el hasta ahora tan poco provechoso informe de gestión se convierta en una herramienta realmente útil para el inversor. El objetivo es que se convierta en un elemento que facilite al accionista información sobre la evolución de los negocios y las perspectivas de futuro de la empresa a través de la inclusión de información bursátil, riesgos y prácticas de gobierno corporativo.
La labor de aleccionamiento de los auditores
'Muchas empresas no estaban al tanto de los cambios legislativos y aunque la ley no pide que el auditor verifique el contenido del informe de gestión, sí hemos tenido que recordar a michas empresas que tenían que mejorar el contenido del informe', explica el socio de PwC Antonio Vázquez.En la misma línea se expresa el gerente de Deloitte Raúl Fidalgo, quien considera que los auditores están realizando una labor de divulgación sobre el deber de cumplir con la nueva norma. 'Estamos haciendo una labor de aleccionamiento para que las empresas sean conscientes de sus nuevas obligaciones', señala.Antonio Vázquez afirma que hasta ahora los informes de gestión sólo tenían que cumplir cinco requisitos (evolución del ejercicio, las perspectivas de futuro, las operaciones de I+D, los movimientos con acciones propias o hechos posteriores que pudieran tener impacto en las cuentas anuales) y con que se pusiera algo de cada uno de ellos, el Registrador Mercantil lo pasaba.El gerente de Deloitte afirma que muchas empresas 'despachaban' el informe de gestión en tan solo cinco líneas. Algunos de esos ejemplos provenían incluso de las grandes.