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5d. Guía para el inversor

Las grandes fortunas refuerzan su apuesta por la Bolsa

Las principales Sicav ya tienen en renta variable 7 de cada 10 euros invertidos. Las acciones extranjeras ganan gran peso

Ya que no pueden tener tantos ceros en la cuenta corriente como las grandes fortunas, a los inversores minoritarios les queda el consuelo de poder estudiar sus estrategias de inversión. æpermil;stas pueden ofrecer valiosas pistas acerca de las tendencias de los mercados gracias a la información que manejan estas personalidades y al asesoramiento que les prestan desde los más selectos despachos de banca privada del país.

La conclusión es sencilla: las mayores fortunas españolas siguen elevando su perfil de riesgo y, en estos momentos, de cada 10 euros que tienen invertidos siete están en renta variable. Así se desprende del estudio realizado por Cinco Días acerca de la composición de las carteras de 38 de las principales sociedades de inversión de capital variable (Sicav) del mercado, entre las que se incluyen las sociedades de las primeros españoles en la clasificación de la revista Forbes como Amancio Ortega, Alicia Koplowitz, la familia del Pino, Rosalía Mera, Manuel Jové o Juan Abelló, entre otros.

A lo largo de las últimas semanas las Sicav, el instrumento de inversión favorito de las grandes fortunas, han remitido a la CNMV sus estados financieros correspondientes al ejercicio 2005. A 31 de diciembre del pasado año las 38 sociedades analizadas destinaban de media el 71,46% de su patrimonio a la renta variable y sólo el 28,52% a la renta fija. Estos datos contrastan con los del cierre del ejercicio 2004, cuando los ricos españoles tenían invertido sólo el 62,03% en acciones y el 38,1% en bonos y otras emisiones de renta fija.

Los expertos atribuyen este cambio a dos factores: por un lado, la fortaleza de las Bolsas ha incrementado el valor de las participaciones en renta variable y, como consecuencia de ello, la ponderación de estos activos en la cartera; y, por otro, los ricos ha ido dando órdenes a sus gestoras para comprar más acciones. 'Aunque mantenemos los niveles de riesgo totalmente controlados, sí que es cierto que muchos clientes son ahora más tolerantes con la renta variable después de tres años alcistas y gracias a los buenos resultados empresariales, la confianza económica y la falta de atractivo de otras inversiones', reconoce Santiago Churruca, director de estrategia de inversiones de DB Private Wealth Management (DB PWM).

Este diagnóstico es compartido por Rafael García de la Rasilla, presidente de Banif Gestión, quien considera que la apuesta de las grandes fortunas por las acciones prosigue en 2006. ¢Está claro que la Bolsa no va a subir indefinidamente pero, hoy por hoy, la inversión en renta variable sigue justificada porque las valoraciones son todavía atractivas. El mercado tiene una base fundamental sólida y, por lo tanto, no ha llegado aún el momento de tomar decisiones drásticas y reducir las posiciones en Bolsa. Evidentemente, en la medida en que los índices mantengan el fuerte arranque del año irá quedando menos potencial para la segunda parte del ejercicio¢, argumenta. La composición de las carteras de los ricos es bastante heterogénea, pero en la mayoría se repiten ciertos nombres como Telefónica y Santander, entre los grandes valores, y Acerinox y Mapfre, entre los medianos. También llama la atención el incremento de peso que tuvieron a lo largo de 2005 aquellos sectores que ya están inmersos en procesos de concentración, como el eléctrico, o aquellos en los que pudiera comenzar, como el financiero (principalmente entre los bancos medianos). ¢El propietario de la Sicav no nos pide que intentemos anticiparnos a operaciones corporativas concretas, pero sí nos exige una gestión eficiente y eso pasa por tomar posiciones en aquellos sectores en los que se pueden producir movimientos de concentración, tal y como ha ocurrido el caso del sector eléctrico¢, comenta Churruca.

El continuo aumento de la inversión de las grandes fortunas en renta variable tiene una segunda lectura y es que los ricos españoles tienen su patrimonio cada vez más diversificado internacionalmente. A 31 de diciembre de 2005 las 38 Sicav analizadas tenían de media el 41,58% de su patrimonio invertido en renta variable extranjera, frente al 35,8% de 2004; el 29,89% lo habían destinado a la Bolsa española, hace un año era el 26,1%; el 22,9% estaba en activos de renta fija nacional (en 2004 era el 30,65%); y únicamente el 5,63% en bonos extranjeros, frente al 7,44% del pasado ejercicio. ¢Aunque la renta variable española sigue siendo una parte importantísima de nuestras carteras, sí es cierto que hemos reducido algo nuestra exposición porque lleva más tiempo subiendo que el resto de mercados y a un ritmo mayor. Por lo tanto, las acciones españolas ofrecen una valoraciónmás ajustada que la que puedan tener los títulos de otros mercados europeos o el estadounidense¢, apunta García de la Rasilla. Desde DB PWM creen que en la actualidad el mercado europeo más atractivo, ¢tanto por valoración como por potencial debido a las reformas estructurales económicas que se están emprendiendo¢, es el alemán. A esta división de banca privada también le gustan los mercados de ¢Japón, China, India y Brasil¢.

El fuerte tirón de la Bolsa en 2005 ha permitido que las grandes fortunas sean un poco más ricas. Las Sicav analizadas por este periódico tenían alcierre del pasado año un patrimonio conjunto de 3.839 millones de euros, lo que representa un incremento del 9,55% con respecto a los 3.504 millones que tenían el 31 de diciembre del año 2004. Aunque se trata de una revalorización que podría calificarse de modesta, porque es la mitad de la experimentada por la Bolsa española en 2005 (el Ibex 35 cerró con una subida del 18,2%) sirve con creces a los objetivos que se fijan los grandes patrimonios a la hora de crear una Sicav. Y es que los expertos de banca privada señalan que las inversiones de los ricos pueden clasificarse en tres grandes apartados. Por un lado están las inversiones estables, que conforman el patrimonio histórico de la persona o de la familia, es decir, la participación que tiene, por ejemplo, Amancio Ortega en Inditex. Luego está la denominada liquidez, que es la que está invertida en las Sicav y con la que buscan batir a la inflación. Por último, los grandes patrimonios tienen en el capital riesgo otra vía de inversión, cuyo horizonte temporal es de un plazo mayor al de las Sicav.

Estilos de inversión diferentes entre los ejecutivos

Las Sicav no son coto exclusivo de las grandes fortunas. También los ejecutivos de las principales compañías cotizadas utilizan estos instrumentos para diversificar su patrimonio. Es el caso de Francisco González, presidente del BBVA, César Alierta, presidente de Telefónica, y José María Castellano, ex consejero delegado de Inditex y actual asesor del presidente en Fadesa. Cada uno de estos ejecutivos tiene un estilo de inversión diferente. El más conservador es Castellano, que tiene el 70% de la cartera de Dorneda en renta fija. Dentro de sus apuestas en Bolsa española destacan Repsol, Santander, Telefónica y NH Hoteles. No tiene acciones ni de Inditex ni de Fadesa aunque sí posee títulos de Cementos Portland, compañía por la que ha estado a punto de fichar como presidente. El polo opuesto a Castellano es Alierta. El peso de la renta variable en su Sicav, Grupo Arce, alcanza el 80,7%. Los valores que más ponderan en la parte destinada a la Bolsa española son Altadis, BBVA, Telefónica y Logista. Otro inversor con un perfil agresivo es González, con una exposición a la renta variable que alcanza el 76% de la cartera de Orto Inversiones. Los fondos del BBVA son los instrumentos que utiliza González para comprar acciones españolas. Su participación en el banco (tiene el 0,039% del capital) la canaliza en cambio a través de una sociedad limitada, Belegar Inversiones.

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