El negocio de las empresas españolas en Europa se dispara por las adquisiciones
Las empresas españolas son cada vez más internacionales. Las cuentas del último ejercicio muestran un menor peso del negocio local y un mayor crecimiento exterior, sobre todo en Europa, gracias a las adquisiciones.
En un momento de tensión entre los principios proteccionistas y los de la unidad del mercado europeo, las cifras de las empresas españolas no dejan lugar a dudas. España representa cada vez una porción menor de sus ingresos y el negocio exterior gana peso.
Hasta ahora el foco de la expansión internacional de las empresas españolas había estado principalmente en Latinoamérica., pero poco a poco las empresas españolas han ido perdiendo el miedo a Europa y se han lanzado a una carrera de adquisiciones que ha provocado que la cifra de negocio en la UE se dispare.
En el último ejercicio, el importe neto de la cifra de negocio de las empresas españolas en Europa se disparó un 74,6% hasta los 37.450 millones de euros. En los cálculos no se incluye a Arcelor, cuya nacionalidad no es española y tiene la mayor parte de su negocio en otros países europeos.
La opa sobre O2 de Telefónica permite pronosticar que la tendencia seguirá
Compras como las de Abbey, Snet, Gecina o Amey impulsan los ingresos en la UE
La facturación en la Unión Europea ha pasado de representar menos del 10% del total a suponer un 13,3%. Si la comparación se hace con respecto a la cifra de negocio en España, la proporción de la facturación europea ha pasado del 15% al 22%.
El fuerte crecimiento de la cifra de negocio española en Europa es consecuencia del crecimiento a través de fusiones y adquisiciones.
La más importante en las cuentas del último año ha sido la compra del Abbey National por el Santander, que ha disparado los ingresos por intereses y rendimientos asimilados del banco en Europa. Altadis, que en su día integró Seita y ahora suma la compra de Etinera, es la empresa española con más negocio europeo, casi dos tercios del total. Le sigue NH Hoteles, que en su día adquirió la holandesa Krasnapolsky. La cifra de negocio europea también se ha disparado en los casos de Endesa (con las adquisiciones de Snet y Endesa Italia), Metrovacesa (que compró la francesa Gecina) o Ferrovial (con la británica Amey), por citar sólo unos pocos ejemplos.
Telefónica ya ha ido incluyendo a Cesky en sus cuentas, pero el gran salto lo dará con la integración de O2, que sumará más de 11.000 millones al negocio europeo.
La tendencia, de ese modo, parece imparable. En 2006 la previsión vuelve a ser que el negocio europeo crezca mucho más que el español.