El conflicto iraní será remitido al Consejo de Seguridad de la ONU
El director general del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), Mohamed El Baradei, aseguró ayer en Viena que el programa nuclear iraní será remitido inmediatamente al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, con capacidad sancionadora. No obstante, afirmó que sigue siendo optimista sobre una solución negociada a la crisis, pese al cruce de acusaciones y amenazas que protagonizaron ayer EE UU e Irán.
'Tarde o temprano todas las partes van a darse cuenta de que no hay otra opción que volver a las negociaciones', afirmó el responsable de la agencia tras el final de la Junta de Gobernadores.
La opción de remitir la crisis iraní a Naciones Unidas era la defendida por EE UU y Europa. En esta tercera sesión en Viena, el embajador estadounidense ante el OIEA, Gregory Shulte, apuntó que, según expertos de la ONU, Irán dispone de 85 toneladas de uranio en forma de gas, 'suficiente para enriquecer uranio y fabricar unas diez bombas'.
El diplomático defendió ante el pleno de la Junta de Gobernadores, compuesto por 35 países, que 'ha llegado el momento de que actúe el Consejo de Seguridad'. Para la Casa Blanca, este órgano debe 'enfatizar que Irán sufrirá las consecuencias si no cumple sus obligaciones'.
Aunque el martes se anunció que el Consejo se reuniría en un plazo mínimo de 30 días, el número tres del Departamento de Estado norteamericano, Nicholas Burns, afirmó que el dossier del programa nuclear iraní será examinado por la ONU a partir de la próxima semana. 'Irán no ha cumplido las condiciones impuestas, por lo que vamos a comenzar una nueva fase de diplomacia', declaró.
Teherán respondió que 'EEUU tiene los medios para provocar el mal, pero ellos también son susceptibles de sentir en sus carnes el dolor'.
La OPEP mantiene su producción
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) acordó ayer mantener de momento estable su actual cuota conjunta de producción, según adelantaron los ministros del grupo tras una reunión oficiosa en Viena. El ministro venezolano de Energía, Rafael Ramírez, confirmó que 'hay un consenso de que en este momento vamos a mantener la producción al nivel en que está'. La citada cuota, establecida en 28 millones de barriles diarios desde el pasado 1 de julio, es la suma del bombeo de diez de los once países miembros y se mantendrá hasta el 1 de junio próximo.