El beneficio de las constructoras marca máximos al crecer un 20%
El tirón de la obra pública, unido al rendimiento que sacan las constructoras de negocios como los servicios y la energía, propiciaron un año récord. Las seis grandes (ACS, Ferrovial, FCC, Acciona, Sacyr Vallehermoso y OHL) ganaron un 20% más.
Las ventas de las seis constructoras cotizadas alcanzaron 39.666 millones, una cifra igual a toda la obra pública que sacaron a concurso las administraciones central, regionales y locales. Y el beneficio agregado llegó a máximos tras situarse en 2.285 millones tras crecer un 20,5%, de acuerdo con la nueva norma contable que entró en vigor el año pasado.
Con las anteriores normas, el resultado de 2004 rondaba los 1.500 millones, con lo que la comparación daría incluso un crecimiento superior, del entorno del 50%.
Todas las grandes del sector, con la excepción de Ferrovial y FCC, aumentaron su resultado neto más del 35% y reflejaron así la bonanza que aún vive un negocio determinante en el PIB. Todas también aceleraron en 2005 la expansión mediante compras, esencialmente de empresas de servicios, en las que invirtieron 6.000 millones.
Olvidado ya el menor ritmo de obra pública por parte del Ministerio de Fomento en 2004, las constructoras han recogido frutos con millonarios contratos de AVE y también de carreteras. Aunque en este último negocio, lo mejor está por venir ya que este año está previsto que Fomento licite los primeros contratos de concesiones administrativas para mantener las autovías más antiguas (de la A-1 a la A-4) por más de 1.000 millones. A la inversión de Fomento se sumaron algunos grandes contratos que apuraron los Gobiernos regionales y locales. En ellos, el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid estuvieron a la cabeza con la faraónica reforma de la M-30 y la construcción de ocho hospitales, respectivamente.
Pero la pura construcción va cediendo terreno a las concesiones de infraestructuras y servicios, que las constructoras impulsan cada vez más, entre otras razones, porque tienen márgenes más altos. Así, ACS, Ferrovial (con la opa por el gestor de aeropuertos británico BAA en el aire) y FCC apoyaron el incremento de resultados en el empuje de los servicios y, en menor medida, también Sacyr. ACS, además, protagonizó el salto al sector de la energía al comprar el 24,5% de Unión Fenosa y una opa por el 10% más que se cerró el lunes.
Mientras, en Acciona la creciente apuesta por las energías renovables se reflejó en los resultados difundidos ayer. Ganó un 41% más, hasta 324 millones, por encima de lo esperado. La energía, tras integrar el 100% de Energía Hidroeléctrica de Navarra (que completó en enero del año pasado) aporta ya el 32% del Ebitda (beneficio antes de impuestos, intereses y amortizaciones). La deuda del grupo casi se duplicó tras inversiones en compras y desarrollo, hasta 1.108 millones.
Brasil, el motor de las ganancias extra de OHL
La pequeña de las grandes constructoras, OHL, más que duplicó sus beneficios el año pasado, hasta 102,3 millones gracias a la salida a Bolsa de su filial en Brasil. Sin el efecto de unas plusvalías netas de 47 millones los resultados habrían crecido un 37%. El grupo que preside Juan Miguel Villar Mir ha creado dos direcciones de negocio nuevas: medio ambiente (con la vista puesta en el negocio de las desaladoras que licitará el ministerio) y construcción internacional. El esquema entra en vigor en abril.Preguntado por el código de buen gobierno que prepara la CNMV, Villar Mir se alineó con las grandes empresas del Ibex y afirmó que 'la exaltación de los consejeros independientes no debe a dividir los consejos' porque 'acaban con ellas'.