La CMT rectifica y anula la sanción a Telefónica Móviles por el conflicto con Amena
Alegría para Telefónica Móviles y revés para Amena, que se queda sin ingresar 42,9 millones. La CMT ha dado marcha atrás a una resolución que tiene poco más de un mes y acepta ahora el argumento de Telefónica.
Es un hecho extremadamente inusual que la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) estime un recurso de reposición, porque son los que se interponen contra sus propias resoluciones y es raro que un mismo organismo cambie de opinión sobre algo que ha decidido hace sólo cinco semanas.
Pero esta vez lo ha estimado y lo ha hecho en su integridad. También es cierto que la resolución que acaba de anular no es de las que se ven con demasiada frecuencia en la mesa del regulador, puesto que implicaba el pago de una cantidad millonaria de un operador a otro.
Los protagonistas son Telefónica Móviles, perjudicada primero y exonerada ahora, y Amena, receptora de una penalización de 42,9 millones de euros que ya no llegará a sus arcas.
Las fechas clave son el 12 de enero de este año y el pasado jueves, 16 de febrero, momento de la primera resolución condenatoria para Telefónica Móviles y de la segunda exculpatoria.
El tema de controversia son los precios de terminación, los que un operador paga a otro por finalizar en su red una llamada originada en otra infraestructura. Y el origen del conflicto fue Amena, que denunció a Telefónica Móviles ante la CMT, por la presunta negativa de ésta a aceptar que la hoy filial de France Télécom le aplicara unas determinadas tarifas aprobadas con el beneplácito del regulador.
La comisión comenzó su análisis y el pasado 12 de enero determinó que Amena tenía razón, que Telefónica Móviles se había negado a aceptar esos precios y que por ese motivo debían ser de aplicación otras tarifas que no eran las rechazadas, sino unas anteriores y más caras.
Diez meses de ajuste
Además del perjuicio de tener que pagar unos precios más elevados, la CMT obligaba a Telefónica a 'regularizar' los pagos efectuados a Amena durante diez meses. Es decir, debía abonar la diferencia entre una y otra tarifa, en lo que suponía el desembolso de 42,9 millones de euros, que debía cobrar Amena.
La maquinaria jurídica de Telefónica Móviles se puso en marcha sin dilación en cuanto se conoció este castigo. Según fuentes conocedoras de la situación, inundó a la CMT con cartas y documentos que, a su juicio, probaban que no hubo nunca desacuerdo con Amena por las tarifas y que tampoco existió rechazo al pago. También cuestionó la desproporcionalidad de la penalización que le tocaba pagar.
La CMT ha aceptado los argumentos de Telefónica Móviles y, a la luz de los documentos presentados, ha virado totalmente su opinión. Según fuentes cercanas al proceso, el regulador decidió en su consejo del pasado jueves aceptar en su integridad el recurso de reposición de la operadora celular y dejar sin afecto su decisión anterior. Amena, por tanto, se queda sin cobrar 42,9 millones.
El problema de los precios distintos según el operador
Los conflictos con los precios de terminación son una constante, tanto entre los operadores de móvil como entre ellos y los de telefonía fija. El origen de los problemas suele ser Amena y lo es porque sus tarifas son distintas a las de Telefónica Móviles y Vodafone. Estos precios los fija la CMT, que siempre ha considerado que Amena, por ser la última en llegar y tener menos cuota de mercado, debe ser protegida. La forma de hacerlo es poner unas tarifas más altas para esta firma que para las demás, lo que supone un beneficio, puesto que se ingresa de los rivales más de lo que se les abona.En el caso concreto de estas dos últimas resoluciones, por ejemplo, Telefónica Móviles tendría que haber pagado a Amena unos precios un 56% superiores a los suyos, según la primera decisión de la CMT.