Test europeo

¿Es Europa capaz aún de avanzar? La nueva directiva sobre servicios es un test importante sobre un asunto decisivo. La unificación europea del mercado de servicios es indispensable: este sector representa el 70% del empleo de la Unión y su futuro, si tenemos en cuenta que la agricultura y la industria ya no pueden crear más puestos de trabajo (...). La recuperación del crecimiento europeo pasa, especialmente, por una mayor competencia en la banca o en la distribución.

Pero esta unificación plantea un inmenso problema social, especialmente de salarios. ¿En qué medida y con qué derecho social, un suministrador de un país puede proponer sus servicios en otro país? (...) El problema se ha agravado con la ampliación.

El proyecto de directiva (...) quería eliminar todas las trabas de un golpe, otorgando al suministrador de servicios la legislación de su país de origen (...). Esto haría saltar todas las legislaciones laborales y se correría el peligro de comprometer una carrera hacia el 'desfavorecido social'. El argumento ha pesado mucho en favor del 'no' en el referéndum sobre la Constitución.

¿Es posible para los Veinticinco avanzar aún o bien la fractura aparecida con el proyecto de Constitución entre el bando liberal y el social es tan amplia que impide todo avance? El compromiso no es perfecto. Pero Europa no debe pararse.