El Congreso aprueba la reforma estatutaria valenciana con los votos de PP, PSOE y CC
La reforma del Estatuto valenciano enfila su recta final después de ser aprobada ayer por el pleno del Congreso con los votos favorables del PSOE, el PP y Coalición Canaria. Ahora le resta el paso por el Senado, la ratificación definitiva por el Congreso y el traslado final a las Cortes valencianas para su posterior entrada en vigor.
El pacto original entre los dos grandes partidos ha permitido una tramitación relativamente tranquila del proyecto, aunque estuvo a punto de romperse por la intención inicial del PSOE de ceder a las pretensiones de IU para rebajar del 5 al 3% el techo electoral necesario para obtener representación en el Parlamento autonómico. Otra enmienda polémica pretendía eliminar del texto la expresión 'idioma valenciano'.
CiU recordó ayer que el Tribunal Constitucional aclaró en 1997 que el catalán y el valenciano son la misma lengua con dos denominaciones. En opinión de la coalición nacionalista, la reforma del Estatuto valenciano vuelve a 'abrir la puerta potencial del conflicto' en materia lingüística por una 'irresponsabilidad compartida del PP y el PSOE'. Volverá a defender la 'unidad lingüística' en el Senado.
En vista de que peligraba el consenso básico sobre el Estatuto, el PSOE renunció finalmente a incorporar estos cambios solicitados por los grupos minoritarios, de ahí su rechazo a la reforma. No obstante, IU también insistirá en el Senado, a través de la correspondiente enmienda, en la necesidad de rebajar el techo electoral al 3%.
En contra de la reforma votaron CiU, ERC, PNV, IU-ICV y el Grupo Mixto, que coincidieron en criticar el trámite que ha seguido en el Congreso, ya que 'las prisas' del PSOE y del PP, a juicio de los portavoces de estos grupos, impidieron incluir sus aportaciones.
La recta final en la tramitación del Estatuto valenciano coincide con el inicio de la discusión en ponencia del Estatuto catalán, trabajo que durará alrededor de dos meses. La diferencia fundamental en el proceso de tramitación de ambos estatutos es que el catalán incluye la celebración del correspondiente referéndum, paso no previsto para el valenciano.