Zapatero sella la Ley de Capitalidad de Madrid con un centro para la paz
La puesta de largo de la Ley de Capitalidad se selló ayer en el Palacio de la Moncloa con el anuncio por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de la construcción de 'un gran centro para la cultura de la paz' en Madrid. En el recinto, que tendrá carácter singular por su arquitectura vanguardista, van a trabajar mano a mano organizaciones no gubernamentales (ONG) y administraciones para desarrollar proyectos que apoyen la paz mundial, en una ciudad castigada por el terrorismo internacional. El edificio contará con salas de exposiciones y conferencias aunque no será considerado como sede de la Alianza de las Civilizaciones, proyecto impulsado por Zapatero, el presidente turco Recep Tayeb Erdogan, y la Secretaría General de la ONU.
Zapatero recalcó ayer que el edificio servirá para saldar una vieja deuda con la capital, ya que 'España debe mucho a Madrid y Madrid debe mucho a España'. El presidente destacó en el acto las buenas relaciones con el gobierno de la ciudad que preside el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón y su lealtad institucional. Al acto de presentación de la citada ley (ya fue aprobada en diciembre por el Gobierno) asistió el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, y el alcalde Gallardón, acompañado por representantes de los grupos políticos municipales y regionales. Se notó la ausencia de los ediles de IU de la capital y de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre (asistió el vicepresidente Ignacio González). Aguirre mantuvo con Gallardón en meses anteriores discrepancias sobre el desarrollo de algunos puntos de la Ley de Capitalidad referidos a la participación en infraestructuras en las que tiene competencia la Comunidad. El texto, finalmente acordado a tres bandas (Gobierno central, regional y local), incluye la participación del municipio en todo tipo de infraestructuras (aeropuertos, tren y metro). Amplía también las competencias en asuntos como seguridad vial, vivienda protegida y calidad ambiental, atendiendo la especificidad de Madrid como capital del Estado.
Ley sin financiación
Sin embargo, no recoge las pretensiones iniciales de ampliar la financiación para la capital (aumento del porcentaje sobre ingresos estatales) y modificar la fiscalidad (dar progresividad a los tributos municipales) como quería Gallardón. Tales asuntos serán debatidos con el resto de municipios en la próxima reforma de la financiación local. En cambio, el Ministerio de Hacienda sí ha aprobado el plan económico a cuatro años (2005-2008) de Gallardón para financiar con más endeudamiento las costosas obras de la M-30.