El motor pide 50 medidas contra la crisis
Reducir los impuestos, presionar al Gobierno francés para mejorar los enlaces Los diputados ya conocen de primera mano las 50 principales reclamaciones de la industria del automóvil, destinadas a mantener la competitividad de las fábricas instaladas en España y garantizar el futuro del sector en la Península.
El envío de este listado de reclamaciones presentadas por la patronal de los fabricantes de automóviles y camiones, Anfac, a los miembros de la Comisión de Industria es consecuencia de la comparecencia el pasado 27 de octubre del presidente de la organización empresarial, Juan Antonio Fernández de Sevilla, ante una representación de la Cámara Baja. Este encuentro sirvió para que el también presidente de Renault España les trasladase que esta industria está 'enferma' y detallase las amenazas que planean sobre una industria que aporta el 5,8% del PIB, según los datos de la propia Anfac. Cuando concluyó su alocución, el también presidente de Renault España aseguró a los periodistas que hay múltiples 'pócimas' para mantener en España a los fabricantes de coches, entre ellas 'trabajar más y cobrar menos'.
Durante la comparecencia, los diputados solicitaron a Fernández De Sevilla un documento con los problemas que aquejan a esta industria y al que ha tenido acceso Cinco Días. Las propuestas de la industria abarcan cuestiones como la consecución de un contrato temporal de varios años, que se adapte a la vida útil de un modelo.
Además, los fabricantes se han quejado de las alzas de hasta el 4,9% de las tarifas eléctricas, que obligarán a subir los precios de los coches (la energía se lleva un 1,5% del precio final de media). Los fabricantes también se muestran disconformes y preocupados ante el hecho de que el Real Decreto que fija las tarifas para 2006 deniega el acceso de los fabricantes de automóviles a las tarifas de acceso de conexiones internacionales. Otra de las quejas de los fabricantes de coches es que al sector se le obliga a surtirse del mercado libre, mientras que otras industrias disponen de tarifas especiales.
En el campo de la logística, los fabricantes de automóviles exigen al Gobierno que mantenga 'la línea de presión actual en la UE' para lograr desbloquear la postura francesa, que antepone las comunicaciones con el resto de Europa en detrimento de las líneas con España. Además, sería necesario un nuevo paso fronterizo en los Pirineos para potenciar el transporte de vehículos y de mercancías. En su documento, los fabricantes promueven la liberalización del transporte ferroviario y de los servicios portuarios obtener tarifas más competitivas; un impulso al desarrollo de la doble vía ferroviaria para mercancías; que se incremente la longitud máxima de los trenes desde los 450 metros a los 750 metros con los que circulan en el resto de Europa; un alza de la altura máxima permitida para trenes; e incentivos para el transporte marítimo a corta distancia.
Anfac también hace hincapié en la 'enorme carga fiscal que soporta el automóvil y que excede, con mucho los costes directos e indirectos' que genera la industria. Esta 'carga' supone, a su entender, 'un obstáculo para el desarrollo del mercado español'. Así, actualmente, 'la situación para adquirir un vehículo' en España es 'marcadamente desfavorable' en comparación con Alemania, Francia, Italia y Reino Unido, ya que la compra de un coche sufre un mayor coste fiscal de un 23% a un 28%.
Es esta situación la que ha llevado a la industria a reclamar en repetidas ocasiones la eliminación de la fiscalidad a la compra de los turismos, una reducción que podría compensarse con el aumento de la fiscalidad al uso, en línea con la tendencia en los principales países productores europeos.
En lo que respecta a la fiscalidad, Anfac explicó al Congreso que es necesaria una reducción del Impuesto sobre Sociedades, algo necesario para poder competir con los nuevos países de la UE. Además, también se subraya la necesidad de potenciar el uso de la deducción fiscal de innovación, desarrollo e investigación (I+D+i). Para ello, debería eliminarse el límite de aplicación de la deducción por este concepto en la cuota del impuesto, y a su vez, eliminar el límite de desgravación sobre gastos de I+D de actividades realizadas en el extranjero. La CE ha solicitado al Gobierno en repetidas ocasiones el cumplimiento de este punto.
Advertencia de Anfac
La producción de coches cayó en 2005 hasta 2,7 millones de unidades, menos de lo que se fabricaba en 2002.
La patronal Anfac ha advertido en repetidas ocasiones que si se prolonga la caída de producción, habrá consecuencias en el empleo.
Plantas garantizadas, modelos en peligro
Los principales portavoces de los grandes grupos automovilísticos presentes en España parecen estar de acuerdo en un aspecto: las plantas españolas tienen su futuro asegurado a medio plazo. La verdadera pelea está en lograr modelos que fabricar, para lo cual ha surgido la dura pelea de Europa del Este. Es el caso del Opel Meriva, una tarea que por ahora General Motors tiene encargada a Figueruelas. La multinacional, sin embargo, estudia llevar la producción a Polonia y, en breve, comunicará su decisión. Hace dos años, Volkswagen retiró a Seat en Martorell parte del Ibiza, que se trasladó a Bratislava, como medida de presión para alcanzar un convenio satisfactorio. Ford dejará de fabricar el Ka en Valencia en 2007, ya que su sustituto se montará también en Polonia. La otra cara buena la dan el Clio y el Modus, dos apuestas de Renault para Valladolid; o el 207, que Peugeot fabricará en Villaverde (Madrid); o los nuevos modelos de todoterreno Navara y Pathfinder de Nissan, para Barcelona, y un nuevo camión de la compañía nipona, que se construirá en Ávila. La factoría catalana aspira a adjudicarse en marzo la producción de un nuevo modelo para 2007, que podría ser un vehículo comercial o un todoterreno, los dos segmentos en los que se ha especializado.
Menos producción en 2006 tras la caída de 2005
El récord histórico de ventas registrado en 2005, con 1,57 millones de unidades matriculadas, no ha tenido reflejo en el aspecto industrial. El año pasado salieron de las 18 plantas españolas 2,75 millones de automóviles, con una caí-da del 8,62%. Los turismos, el 76% de toda la producción, tuvieron el mayor desplome, al caer un 12,6%; esto es, 304.333 unidades menos.El descenso registrado el año pasado es el mayor desde la gran crisis de 1993, cuando las fábricas ubicadas en España ensamblaron 1,7 millones de automóviles, 355.472 menos que el ejercicio anterior. Este descenso también provocó una disminución del 9,4% en las exportaciones, hasta 2,25 millones de unidades.Tres son las causas de la caída, según Anfac. La primera, el estancamiento del mercado de la Unión Europea, donde España coloca el 85% de las exportaciones. Además, los vehículos españoles están perdiendo cuota de mercado ante la competencia de Europa del Este y de Asia.