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Vivienda

Caruana prevé un aterrizaje "ordenado" del precio de la vivienda

La economía española ha cerrado el año 2005 con un fuerte crecimiento, del 3,4%, tres décimas más que en 2004 (3,1%), y una 'moderación' en los precios de la vivienda, según estima el Banco de España en su último boletín económico.

La entidad que dirige Jaime Caruana estima que el PIB español creció en el cuarto trimestre del año al 3,5%, a igual ritmo que el trimestre anterior y por encima de lo cosechado en el primer semestre, con lo que la tasa media para todo el año quedaría en el 3,4% (el dato oficial de contabilidad nacional lo hará público el INE en las próximas semanas). La base de este alto crecimiento (duplica al de la media de la zona euro) se centra en el vigor de la demanda interna, espoleada por el consumo privado (familiar) y la inversión.

El crecimiento del consumo de los hogares (el 4,4% según la entidad) se ha simultaneado con una corrección en el mercado inmobiliario. El Banco resalta que, 'a lo largo del pasado año, los incrementos del precio de la vivienda tendieron a moderarse, aún conservando tasas de dos dígitos'.

La entidad insiste en que 'esta moderada desaceleración, de confirmarse en los próximos meses, podría facilitar una absorción ordenada de la sobrevaloración existente'. Y es que el Banco de España no ha ocultado en boletines anteriores que existe una sobrevaloración de los precios de la vivienda, entre el 24% y el 35% sobre su nivel de equilibrio, y que ello se debería corregir suavemente para no provocar situaciones no deseadas (consumidores con altas hipotecas a largo plazo, con precios pagados por su vivienda muy por encima de los de mercado).

Ahora bien, la buena noticia que supone esta desaceleración de los precios de la vivienda no impide que la entidad avise, una vez más, sobre la situación financiera de los consumidores. Así, recalca cómo en el año 2005 se ha cerrado 'con un nuevo retroceso de la tasa de ahorro de la familias y un incremento adicional del ratio de endeudamiento, que habría superado el 110% de la renta disponible'.

Por otro lado, el Banco se hace eco del desequilibrio en la composición del crecimiento económico español. Mientras la demanda interna siguió creciendo a tasas elevadas en todos sus componentes (gasto privado, publico e inversión), la demanda exterior mantuvo un 'carácter fuertemente contractivo' durante todo el año. Esta aportación negativa de la demanda exterior neta 'se habría aproximado a los dos puntos' de PIB, según el Banco. Es decir, que sin el componente exterior (exportaciones menos importaciones), el PIB español estaría creciendo ahora por encima del 5%.

Otro punto negro es la parte relativa a los costes. Por un lado, la inflación sigue fuerte (acabó en el 3,7%, en la parte alta de la UE). Por otro lado, los costes laborales se han moderado pero su efecto es muy limitado. En este sentido, la entidad destaca cómo la desaceleración de la remuneración salarial se ha transmitido a los costes laborales unitarios, 'pero en un contexto de avances muy reducidos de la productividad, sigue siendo muy amplio el diferencial de crecimiento con los costes de los países con lo que España compite'.

Esta persistencia en el diferencial de precios y costes en España, según la entidad, 'amplía las pérdidas de competitividad y tiende a hacer potencialmente más gravosa una eventual corrección de los desequilibrios, que siguen acumulándose'.

En el apartado presupuestario, el Banco de España destaca la consolidación fiscal conseguida y el superávit del 1% del PIB para el conjunto de las administraciones públicas, anunciado por el vicepresidente Pedro Solbes.

Plan de reformas: La orientación del Gobierno es buena, pero insuficiente

La persistencia de los diferenciales de costes en España con la media comunitaria deben corregirse con una política económica 'encaminada a favorecer la flexibilidad de precios y salarios y fomentar ganancias de productividad'.El Banco de España resalta en este asunto que el Plan Nacional de Reformas presentado por el Gobierno 'se orienta en esta dirección, si bien sería deseable que se viera acompañado por un impulso más firme en la reforma del mercado de trabajo y de la negociación colectiva'.La entidad hace referencia expresa a la Comisión Europea que acaba de pedir a España un esfuerzo adicional para reducir la segmentación del mercado laboral y aumentar el empleo femenino.Además, el Banco se insta al Ejecutivo español a 'una mayor concreción' tanto de las propuestas específicas en el citado plan de reformas y como en el calendario para su instrumentación.

Inversión: Mejora en el conjunto del año, pero se frena en el cuarto trimestre

Uno de los rasgos diferenciales del año 2005 ha sido la recuperación de la inversión, que ha venido a compensar la relativa pérdida de auge del consumo de los hogares, y sostener la demanda interna en su conjunto.El Banco de España advierte, no obstante, cómo la aceleración de la inversión observada en la primera mitad del año (aumento por encima del 7%) ha tendido a frenarse a partir del tercer trimestre debido al 'suave' freno de la inversión en bienes de equipo y, más recientemente, de la construcción.Para el año 2006, la entidad supervisora confía en que se mantengan unas tasas de crecimiento de la inversión aceptables, en el entorno del 6%. El Banco apuesta por una recuperación de la zona euro y de la economía mundial en general. Esta última crecerá, a su juicio, por encima del 4% en 2006, tirando del volumen de exportaciones españolas.

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