Los inversores europeos doblan su apuesta por la gestión activa
Europa demanda valor añadido. Un 80% del dinero que entró en fondos de Bolsa en Europa el año pasado apostó por la gestión activa, llegando casi a duplicar las suscripciones netas en carteras gestionadas con esta filosofía. Los fondos que replican índices, de gestión pasiva, registraron leves reembolsos.
El debate sobre la idoneidad de la gestión pasiva o la gestión activa es casi tan antiguo como los propios fondos de inversión. Los defensores de la gestión pasiva, entendida como la creación de una cartera que replica un índice y se comporta como tal, aducen que los índices bursátiles terminan por superar en rentabilidad a los gestores en periodos largos de tiempo.
Los defensores de la gestión activa creen, por el contrario, que la selección adecuada de acciones añade un valor a las carteras superior a la rentabilidad de los propios índices.
A juzgar por los datos de entradas y salidas de dinero, parece que el año pasado los inversores europeos apostaron por la segunda opción. Los fondos de renta variable de gestión activa a la venta en Europa registraron suscripciones netas por valor de 73.219 millones de euros entre enero y noviembre de 2005, según los datos de la compañía Feri Fund Market Information con sede en Londres.
La principal ventaja de los fondos de gestión pasiva es que las comisiones son mucho más reducidas
Esta cifra es un 97% superior a la registrada en todo el ejercicio 2004 y equivale al 80% del dinero que entró en fondos de Bolsa el año pasado.
Según la misma compañía, los fondos de gestión pasiva, esto es, fondos cotizados (ETF) y fondos índice, registraron entradas en 2005 por valor de 17.591 millones de euros, un 3,3% menos que en todo 2004. 'En tres años de subida de la Bolsa la gestión activa ha batido a la gestión pasiva y se espera que lo haga en el futuro', explica Jaime Pérez Maura, analista de Allfunds Bank.
Tradicionalmente, los fondos de gestión pasiva han tenido firmes defensores, entre los que se cuentan Burton Malkiel, profesor de económicas de la Universidad de Princeton y autor del clásico Un paseo aleatorio por Wall Street, o el propio Warren Buffet, multimillonario presidente de la sociedad de inversión Berkshire Hathaway.
Los inversores que comulgan con la gestión pasiva apoyan sus argumentos en la idea de que a muy largo plazo los índices terminan por batir a los fondos de gestión activa, pero también en el hecho de que al ser una gestión que replica un índice, requiere menos capital humano y, por lo tanto, las comisiones que se cobran son bastante menores. En última instancia cuanto más elevadas son las comisiones menor es la rentabilidad.
'Para nosotros los fondos indexados son un instrumento para generar alfa valor añadido con bajas comisiones', asegura Bernardus Roelofs, jefe de ventas de ETF en España de HVB. Para Fernando Hernández, responsable de Gestión de Inversis Banco la gestión pasiva tiene valor en mercados eficientes como el de EE UU. 'El gestor puede aportar más valor en mercados y activos menos eficientes, como los emergentes y las empresas pequeñas'.
Los inversores europeos parecen anticipar un periodo algo menos boyante para los mercados de valores. Esa es, al menos, la opinión del consenso de los estrategas, que prevén cierta desaceleración para 2006. 'Puede haber un año en que los índices caigan, pero los fondos de gestión activa logren revalorizar sus carteras', explica José María Luna, director de Análisis de Profim. 'La clave está en elegir bien el fondo de gestión activa', añade este experto, que calcula que existe en torno a un 50% de gestores activos que logran sistemáticamente batir a los índices.
Un 60% de los fondos españoles bate al Ibex
En su tercer año consecutivo de subidas, el Ibex 35 obtuvo en 2005 una revalorización nada despreciable del 18,2%. A pesar de lo abultado de la cifra, hasta un 60% de los fondos españoles que renta variable nacional, según la clasificación de Inverco, asociación del sector, lograron batir al índice. En concreto, fueron 67 los fondos de un total de 112 registrados, los que obtuvieron ganancias superiores al Ibex.En ese universo de fondos se incluyen los que siguen en mayor o menor medida al Ibex y los que conforman su cartera con empresas de tamaño mediano y pequeño.Si se toma como referencia el Índice General de la Bolsa de Madrid (IGBM), la proporción de fondos que baten a esta referencia se reduce considerablemente: tan sólo 30 fondos, un 26%, batieron en 2005 al IGBM. El tirón de los valores medianos explica que este índice ganara un 20,56%, más de dos puntos que el Ibex.Entre los fondos de renta variable nacional recogidos por Inverco existe una decena de productos de gestión pasiva que replican o intentan replicar la composición del Ibex. Estos productos recibieron el año pasado una quinta parte del dinero que entró en fondos de esta categoría.Sus rentabilidades se ajustan a lo esperado: la rentabilidad obtenida en 2005 oscila entre el 18% y el 21%, es decir, revalorizaciones iguales, si no superiores a las del Ibex.Las comisiones que en términos generales aplican estos productos son, con alguna excepción, considerablemente inferiores a las de los fondos de gestión activa. Predominan las comisiones que oscilan entre el 0,4% y el 1%, aunque las hay también que llegan a superar el 2%.