Bruselas pide a España más esfuerzo de liberalización en comercio y energía
La Comisión Europea valora positivamente el programa de reformas español, que pretende llegar al 2% del PIB la inversión en I+D en 2010. Pero critica la falta de liberalización en distribución comercial y mercado energético.
La Comisión Europea realizó ayer la primera evaluación anual de los nuevos programas nacionales de reformas económicas. Bruselas estrena este ejercicio, con el que pretende revitaliza la moribunda agenda pactada en Lisboa hace seis años, con un precavido análisis de las propuestas presentadas por las capitales.
El organismo que preside José Manuel Barroso se limita a subrayar la falta de concreción de algunos programas (como el francés, el italiano o el húngaro) o el catálogo de meras intenciones que recogen otros (el alemán o el luxemburgués). Pero la Comisión se cuida mucho de no buscarse la animadversión de los Gobiernos con críticas aceradas o reproches demasiado contundentes.
En esa línea se enmarca también el análisis del programa español, que se elaboró bajo la tutela de Miguel Sebastián, director de la oficina económica de Presidencia del Gobierno. La Comisión califica el plan de 'ambicioso' y 'centrado en los desafíos más urgentes que afronta el país'.
España se propone, en concreto, doblar la inversión en Investigación y Desarrollo antes de 2010, hasta alcanzar el 2% del PIB nacional, así como elevar cinco puntos la tasa actual de empleo hasta el 66%. Bruselas critica, sin embargo, la pasividad del Gobierno ante la falta de competencia en algunos sectores como la distribución y la electricidad. En este segundo área, la Comisión recomienda mejorar las interconexiones con los países vecinos.
En materia de empleo, el equipo de Barroso critica 'la segmentación del mercado labora', y recuerda 'la necesidad de aumentar la tasa de empleo femenino'. Bruselas advierte a las autoridades españolas que el informe sobre la aplicación del programa de 2006 se centrará, de manera particular, en los dos problemas mencionados.
Propuestas de la CE
La Comisión también presentó ayer las prioridades que, a su juicio, deberían fijarse hasta 2010 los líderes de la Unión Europea en su próxima cumbre de marzo. Bruselas propone objetivos cuantificables en educación, investigación, facilidades para el empresariado, incorporación al mercado laboral y política energética.
El catálogo incluye iniciativas tan ambiciosas como incorporar el capital privado para aumentar del 1,28% al 2% del PIB la financiación de las universidades o el compromiso de que un joven pueda encontrar trabajo o formación sólo 100 días después de terminar sus estudios (o en seis meses hasta 2007).
Entre los indicadores utilizados por Bruselas para medir la posición de cada país en la estrategia marcada en Lisboa, España está en mejor posición que la Unión Europea en inversión empresarial y en tasa de desempleo de las personas mayores.