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La reforma tributaria

El impuesto de sociedades bajará un punto cada año hasta 2011

En cuanto a la reforma del impuesto de sociedades, que entrará en vigor en 2007, también hay novedades importantes. La principal se refiere a los tipos de gravamen. El tipo general del 35% se reducirá gradualmente un punto cada año durante cinco ejercicios hasta llegar al 30% en 2011. Pasará lo mismo con el tipo específico para pymes (30%), que se situará en el 25% también en el año 2011.

Solbes anunció que el Gobierno eliminará todas las deducciones fiscales del impuesto, también de forma gradual de 2007 a 2011, excepto las bonificaciones por doble imposición y las estrictamente territoriales (Canarias, Ceuta y Melilla).

'Eso no significa que el Ejecutivo deje de incentivar materias como la investigación y el desarrollo (I+D), simplemente se hará por otros métodos que no son los fiscales', dijo, tras la rueda de prensa del Consejo de Ministros.

El Gobierno prevé que este año gastará en beneficios fiscales a las empresas más de 6.500 millones de euros, un tercio del cual irá destinado a deducciones por reinversión.

Dividendos exentos

Si el recorte de deducciones perjudica a las empresas lo que sí les beneficia, aunque sea indirectamente, es la exención establecida en el IRPF para los primeros 1.000 euros en dividendos. Esta es la única exención fijada por el Gobierno en toda la tributación del ahorro y fomentará la compra de acciones por parte del pequeño contribuyente, en busca de rentabilidad fiscal.

En la presentación de las principales líneas de la reforma de sociedades, el vicepresidente segundo del Gobierno resaltó que tales modificaciones son sólo una primera parte de la gran reforma del impuesto para adaptarla a los estándares europeos. 'Queda otra parte, muy importante que dejamos reservada para cuando esté diseñado el nuevo plan general de contabilidad', señaló. En esta segunda parte de la reforma de sociedades se incorporarán modificaciones importantes en el código de comercio y la ley de sociedades anónimas.

'Siempre estaré dispuesto a nuevas reformas si la recaudación lo permite', indicó Solbes, refiriéndose, no sólo al impuesto de sociedades sino también al IRPF para quien buena parte de los partidos políticos de la oposición la han tildado de 'insuficiente' dadas las expectativas generadas'. El propio secretario de Organización del PSOE, José Blanco, admitió el viernes que la reforma fiscal es 'menos ambiciosa' que la anunciada por los socialistas en campaña electoral, antes de llegar al Ejecutivo. 'Es una primera parte, que beneficiará, sobre todo, a los trabajadores con rentas bajas', añadió.

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