La Seitt de Fomento creará sociedades para cada proyecto
El transporte aéreo tiene como organismo regulador e inversor del sector al ente público AENA, el marítimo a Puertos del Estado, el ferroviario al Adif y faltaba el transporte terrestre. Por este motivo, el Ministerio de Fomento ha creado la nueva Sociedad Estatal de Infraestructuras de Transporte Terrestre (Seitt), que será la encargada de construir, explotar y gestionar obras en carreteras y también en ferrocarril.
El objetivo, como reconoce el Ejecutivo, es que muchas de las inversiones que se acometan a través de la Seitt no pasen a engrosar el gasto público, ya que serán financiadas por el capital privado.
No obstante, la empresa, presidida por Josefina Cruz, nace con 900 millones de euros de recursos propios y una capacidad de licitación inminente superior a los 1.200 millones.
En el caso de que el proyecto vaya a financiarse con capital privado total o parcialmente, el Ministerio de Fomento ha confirmado que se crearán otras sociedades, una por cada proyecto, que, no obstante, serán dependientes y estarán supervisadas por la Seitt. Uno de los proyectos más ambiciosos de los que prevé hacerse cargo a lo largo de este año será la remodelación de 1.500 kilómetros de autovías de primera generación, obras valoradas en unos 2.000 millones de euros.
La fórmula elegida para esta iniciativa es lo que llaman los expertos 'una modalidad más sofisticada del peaje en sombra', por la que las empresas adjudicatarias recibirán pagos por la construcción y gestión de esa obra en función de unos objetivos. Esos parámetros podrán ser aspectos relativos a la calidad de la obra, la iluminación, la seguridad, o los tiempos de respuesta en caso de accidente, entre otros.
Como los incumplimientos de esos objetivos estarán penalizados con la no percepción del dinero, Hacienda cree que de este modo las empresas asumen riesgos suficientes y esos pagos no serán computados como déficit público. Otra de las fórmulas que se barajan para atraer inversores es la concesión de la explotación de la infraestructura resultante. Este sistema se aplicará sobre todo en el transporte ferroviario, como ya se está haciendo, entre otros, en el enlace Figueras-Perpiñán.